Ginebra (AFP) – Venezuela perdió este martes su asiento en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, tras fracasar en su intento de reelección frente a las candidaturas de Chile y Costa Rica, con lo que Rusia y China pierden un fiel aliado.
Catorce de los 47 escaños de este órgano de la ONU con sede en Ginebra estaban en juego en una votación en la cual los países se presentan divididos por regiones ante el conjunto de la Asamblea General.
América Latina tenía dos escaños libres y en general cada grupo regional preselecciona sus candidatos que luego son elegidos sin problema por la mayoría de la asamblea.
Pero en este caso tres países del bloque se presentaron y en la votación, que fue secreta y sin discursos, Chile obtuvo 144 votos, Costa Rica 134 y Venezuela 88.
En septiembre de este año un informe de la ONU denunció que los servicios de inteligencia de Venezuela cometen crímenes de lesa humanidad bajo las órdenes de las altas esferas del gobierno.
«Brutal agresión contra opositores» –
Varias organizaciones no gubernamentales habían llamado a no votar por Venezuela.
«Una gran noticia que la Asamblea General de la ONU haya rechazado la candidatura de Venezuela para su reelección al Consejo de Derechos Humanos», reaccionó en un tuit Louis Charbonneau, director para la ONU de la oenegé Human Rights Watch.
Antes de la votación, Charbonneau dijo que «la brutal agresión contra opositores en Venezuela hace que el país no tenga las credenciales para pertenecer al máximo órgano de derechos humanos de la ONU».
Según la oenegé Cofavic, en 2021 en Venezuela hubo más de 200 ataques contra activistas de derechos humanos, incluyendo detenciones arbitrarias y allanamientos.
Con la salida de Venezuela, China y Rusia perdieron un aliado de peso en este ente de la ONU que en los últimos meses está más dividido que nunca, desde su creación en 2006.
La composición de este consejo importa, especialmente en un contexto de agudas tensiones geopolíticas que terminan debatiéndose en Ginebra.
La votación se produjo tras una sesión el 6 de octubre en la que por primera vez se intentó discutir y aprobar resoluciones sobre la situación en China, que fueron frenadas por varios países, entre ellos Cuba y Venezuela.
«Venezuela ha sido un aliado constante, tanto de China como de Rusia en este consejo», dijo a la AFP Tess McEvoy, de la oenegé International Service for Human Rights (ISHR).
Esa postura «se confirmó una ves más la semana pasada, cuando [Caracas] se opuso a un simple debate sobre el informe del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos sobre Xinjiang y en la votación (…) en la que se pedía un relator especial sobre la situación en Rusia», agregó.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, celebró el ingreso de su país en el organismo.
«Hemos conocido la muy buena noticia de que como país hemos obtenido la primera mayoría de la región en la votación para la integración del Consejo de Derechos Humanos», dijo el mandatario.