Miami (AFP) – El senador estadounidense Marco Rubio dijo este viernes que «el mundo apoyaría a las Fuerzas Armadas» si emprenden un golpe de Estado en Venezuela, en momentos en que crece la presión internacional sobre el gobierno de Nicolás Maduro.
«El mundo apoyaría las Fuerzas Armadas en Venezuela si deciden proteger al pueblo y restablecer la democracia removiendo al dictador», escribió Rubio, senador por el estado sureño de Florida, en Twitter.
«Los soldados comen de la basura y sus familias pasan hambre en Venezuela, mientras Maduro y sus amigos viven como reyes y bloquean la ayuda humanitaria», prosiguió Rubio, un republicano de origen cubano que ha jugado un papel clave en las políticas de Washington hacia Venezuela y Cuba.
Luego publicó una serie de frases atribuidas a Simón Bolívar, como: «Cuando la tiranía se hace ley, la rebelión es un derecho».
Estos comentarios ocurren tres días después de que el jefe de la diplomacia estadounidense, Rex Tillerson, terminara una gira latinoamericana centrada en buscar una solución regional a la crisis de Venezuela, que podría incluir sanciones petroleras.
Antes de emprender la gira, Tillerson había esbozado ya la idea de que el ejército venezolano podría derrocar al presidente, en comentarios que fueron «condenados categóricamente» por el gobierno venezolano.
«En la historia de Venezuela y otros países sudamericanos, ocurre a menudo que los militares son el agente de cambio cuando las cosas están muy mal y los líderes ya no pueden servir al pueblo», dijo Tillerson en Texas.
«Si este será el caso o no, no lo sé», añadió.
Rubio se reunió el miércoles con el secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, quien ha sido un fiero crítico del gobierno de Maduro, para discutir la crisis en Venezuela.
Aunque apoyado por Rusia y China, el gobierno de Maduro encara el aislamiento internacional y las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea, que lo acusan de autoritarismo.
Además la Corte Penal Internacional anunció el jueves que iniciará un examen para analizar si en Venezuela se han cometido delitos de lesa humanidad.
La oficialista Asamblea Constituyente, que rige a Venezuela con poderes absolutos, adelantó las elecciones -tradicionalmente en diciembre- para el 22 de abril. Esto descolocó a una oposición dividida tras cuatro meses de protestas en 2017 que dejaron 125 muertos.
Maduro, en el poder desde 2013, fue proclamado candidato presidencial del chavismo pese a la criticada gestión de su gobierno. La oposición, de su lado, aún no decide si irá a primarias o elegirá a un candidato de consenso.