Simi Valley (California).- Después de casi una década fuera del país, los Rollos del Mar Muerto han regresado a Estados Unidos como parte de una exposición de clase mundial en la Biblioteca Presidencial Ronald Reagan.
Esta muestra, titulada «Rollos del Mar Muerto: La Exposición», marca un momento histórico al coincidir con el 75.º aniversario del hallazgo de estos manuscritos, considerado uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes de la historia moderna.
La instalación más reciente incluye la destacada incorporación del Rollo de Isaías 4Q57, una pieza fundamental que ofrece una ventana directa al pensamiento religioso y social de los siglos anteriores a nuestra era.
Esta obra, escrita en hebreo cuadrado por antiguos escribas, permite a los visitantes explorar cómo se interpretaba el texto bíblico antes de la redacción de las versiones canónicas que conocemos hoy.
Debido a la extrema sensibilidad de estos documentos a la luz y a las condiciones ambientales, su exhibición sigue un protocolo estricto de preservación. Los rollos se rotan cada tres meses para garantizar su integridad a largo plazo. Esta práctica no solo protege los manuscritos, sino que permite al público presenciar el meticuloso proceso de instalación y sustitución de estas piezas milenarias.
El evento es fruto de casi dos años de trabajo entre expertos internacionales, comisariada por la Dra. Risa Levitt, la Dra. Orit Shamir, el Dr. Joe Uziel y Navit Popovich-Geller, quienes han trabajado estrechamente con la Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA), entidad responsable de la conservación y préstamo de los manuscritos.
La muestra ha sido producida por West Wall Exhibitions y la Fundación RRPFI.
Los Rollos del Mar Muerto, descubiertos inicialmente entre 1946 y 1947 en las cuevas de Qumrán por un joven beduino, revolucionaron la comprensión del judaísmo antiguo y los orígenes del cristianismo.
Actualmente, se conocen más de 900 manuscritos distintos y cerca de 1.200 fragmentos, escritos mayoritariamente en arameo y hebreo. Entre ellos se destacan el Gran Rollo de Isaías y el Rollo de los Salmos, aunque también existen textos sectarios y documentos legales.
Los métodos de conservación han evolucionado enormemente desde que los primeros fragmentos fueron encontrados en jarras de cerámica. Técnicas modernas como el análisis digital, el uso de inteligencia artificial para identificar escribas y la monitorización de la oxidación han permitido ralentizar el proceso de deterioro y, en muchos casos, revertir parte del daño visible.
Una de las piezas más llamativas, el Rollo de Cobre, fue encontrado por el arqueólogo Henri de Vaux y trasladado inicialmente a Jordania. Este documento en particular, con inscripciones en cobre martillado, contiene listados de tesoros escondidos y ha desatado teorías e investigaciones durante décadas.
El Dr. Joe Uziel, jefe de la Unidad de Rollos del Mar Muerto de la IAA, ha destacado la diversidad de las escrituras presentes en los textos y la posibilidad de que múltiples escribas trabajaran en ellos. Esto plantea nuevas preguntas sobre las prácticas de copia y la organización comunitaria de los habitantes de Qumrán.
En esta exposición, se han seleccionado cuidadosamente fragmentos que representan tanto textos bíblicos como sectarios, para ofrecer una visión integral de la colección.
La exposición ha atraído a multitudes durante los fines de semana, incluyendo peregrinos de embajadas, grupos escolares y amantes de la historia antigua. Su éxito ha resaltado el deseo del público por conectar con las raíces de la civilización occidental a través de documentos que han sobrevivido a milenios de historia.
Además del atractivo histórico y religioso, la muestra busca crear conciencia sobre los desafíos que implica la conservación del patrimonio cultural. Se ha puesto énfasis en la necesidad de detener la degradación causada por técnicas de conservación obsoletas aplicadas hace 70 años, y en la importancia de usar tecnología de vanguardia para preservar estos textos para futuras generaciones.
Con el inminente regreso de algunos de los manuscritos a Israel, esta muestra representa una oportunidad irrepetible para el público estadounidense. Ocho rollos que han estado en exhibición serán reemplazados por otros tantos provenientes de los archivos de la IAA, en una operación logística delicada y cuidadosamente planeada por un equipo que ha viajado expresamente desde Israel.
El valor de esta exposición va más allá de la erudición: es una experiencia sensorial, emocional y espiritual. En palabras de sus organizadores, los Rollos del Mar Muerto no solo narran el pasado, sino que siguen dialogando con el presente, ofreciendo claves para entender la evolución de la religión, la escritura y la identidad cultural a lo largo de los siglos.