South Pasadena (California).- El Departamento del Alguacil del Condado de Los Ángeles (LASD), junto con el Departamento de Policía de South Pasadena y otros organismos asociados, anunció recientemente la resolución de un caso de asesinato que había permanecido sin resolver desde 1986.
La víctima, Cathy Small, fue brutalmente asesinada hace más de tres décadas, pero su caso finalmente ha encontrado cierre.
La trágica mañana del 22 de febrero de 1986, el cuerpo de una mujer joven, vestida únicamente con un camisón y con heridas de arma blanca, fue encontrado en la calle cerca de una residencia en la cuadra 800 de Bank Street. Inicialmente catalogada como Jane Doe número 17, la investigación se estancó rápidamente a pesar de los esfuerzos exhaustivos de los detectives.
No fue hasta un día después que un residente de Lake Elsinore reconoció a la víctima como Cathy Small, una joven de 19 años vista por última vez la noche antes de su muerte.
Durante años, el caso de Cathy languideció en archivos polvorientos hasta un sorprendente hallazgo en octubre de 2019, cuando la investigadora médica forense, Brenda Shafer, y el detective Louie Aguilera descubrieron pistas en la residencia de un hombre recién fallecido en la misma calle donde Cathy fue encontrada.
Aunque las pruebas iniciales no relacionaron directamente al hombre con el asesinato, el renovado interés en el caso llevó a una reevaluación exhaustiva de las pruebas existentes.
La determinación de los investigadores y la tecnología moderna de ADN jugaron un papel crucial en la resolución del caso. En agosto de 2020, el Laboratorio Criminalístico del Alguacil logró hacer una coincidencia de ADN que apuntaba a William Lester Suff, un conocido asesino en serie, como el perpetrador del crimen de Cathy.
Suff, que ya cumplía condena por otros asesinatos, confesó el crimen tras ser trasladado a la cárcel central de hombres del Departamento del Alguacil del Condado de Los Ángeles en mayo de 2022.
El impacto de la resolución de este caso va más allá de la mera justicia penal. Proporciona un sentido de cierre no solo a la familia de Cathy Small, que ha vivido con la incertidumbre y el dolor durante 36 años, sino también a una comunidad que había sido oscurecida por la sombra de un asesinato sin resolver.
«Estamos brindando a la víctima y a su familia una sensación de justicia y cierre largamente esperados», dijo el jefe del LASD, Robert Luna. «Juntos, la dedicación de nuestros socios de justicia hizo justicia a este caso».
Deana Larson, la hermana de Cathy, ha expresado su profundo agradecimiento hacia los investigadores por su dedicación y tenacidad.
La Oficina del Médico Forense y la Junta de Supervisores del Quinto Distrito del Condado de Los Ángeles también han sido fundamentales en el esclarecimiento de este caso, mostrando el poder de la colaboración interdepartamental.
El jefe de la policía de South Pasadena, Brian Solinsky, y la supervisora Kathryn Barger destacaron la colaboración y la perseverancia de todos los involucrados como ejemplos sobresalientes de compromiso cívico y profesionalismo.
«Es horrible que le hayan quitado la vida de forma tan violenta y trágica. Hoy estamos ante ustedes para anunciar que se hará justicia para Cathy y su familia», dijo Barger
