Lima (AFP) – El canciller peruano Héctor Béjar renunció este martes apenas 19 días después de haber asumido como secuela de unas polémicas declaraciones sobre el terrorismo que hizo en 2020, que generaron la primera crisis política que enfrenta el presidente izquierdista Pedro Castillo.
«El señor Héctor Béjar Rivera presentó hoy ante el presidente de la República, Pedro Castillo, su carta de renuncia irrevocable al cargo de Ministro de Estado en la cartera de Relaciones Exteriores», anunció la secretaría de prensa de la Presidencia en un escueto comunicado.
Béjar, un sociólogo de 85 años que fue guerrillero guevarista en la década de 1960, desató una crisis política a raíz de la difusión por la prensa de un video de noviembre de 2020 en el que afirma que la Marina de Guerra del Perú fue la primera en efectuar actos terroristas en el país con apoyo de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos. Era una tácita referencia a dos atentados anticubanos perpetrados en 1977 en Lima y a un jefe naval de la dictadura del general Juan Velasco (1968-75).
El ahora excanciller encendió la chispa, sin embargo, al decir que detrás de las acciones terroristas que inició en 1980 el grupo maoísta Sendero Luminoso estaba la CIA, una afirmación falsa y fácilmente refutable.
«El jefe de Estado aceptó la renuncia» de Béjar, agregó la Presidencia sin abundar sobre las razones del alejamiento ni mencionar quien lo reemplazaría al frente de la diplomacia peruana.
Béjar había asumido el cargo el 29 de julio como parte del primer gabinete del gobierno izquierdista de Castillo, quien se impuso sobre la candidata derechista Keiko Fujimori en el reñido balotaje del 6 de junio, tras una campaña marcada por la polarización.
«El terrorismo lo inició la Marina» –
«El terrorismo en el Perú lo inició la Marina, y eso se puede demostrar históricamente; han sido entrenados para eso por la CIA», dijo Béjar durante una conferencia virtual con un grupo de izquierdistas en noviembre de 2020.
También indicó en esa ocasión: «Yo estoy convencido, no puedo demostrarlo, de que Sendero Luminoso ha sido en gran parte obra de la CIA y los servicios de inteligencia».
Atrapado por sus palabras y en medio de una polarización política que puede llevar a una caída del gabinete por el Congreso, Béjar optó por dar un paso al costado.
Momentos antes de hacerse pública la renuncia, Castillo recibió en su despacho al ministro de Defensa, quien acudió acompañado de los jefes de la Marina, el Ejército y la Fuerza Aérea.
La renuncia se precipitó luego de que Béjar se negara a pedir disculpas por sus polémicas expresiones, según dijo a la radio RPP el ministro de Defensa.
«¡Vuelvo a ser libre!» –
La única alusión de Béjar al desenlace de la primera crisis del gobierno de Castillo ha sido un breve aunque expresivo comentario en su página de la red Facebook.
«¡Vuelvo a ser libre!» escribió Béjar, con fama de irreductible en sus convicciones políticas.
Las declaraciones vinculando a la Marina con el terrorismo impulsaron una protesta de un centenar de exmilitares frente a la cancillería.
«¡Respeto a la Marina, fuera Béjar», fue unas de las consignas que se leía en pancartas.
«Él nos ha insultado al decir falsedades acerca de la Marina de Guerra del Perú, la Marina siempre ha sido honesta, honrada», dijo a la AFP Javier, un marino jubilado de 69 años.
El alto mando naval había protestado el lunes en un comunicado señalando que «la Marina de Guerra del Perú deplora afirmaciones de esta naturaleza, que pretenden distorsionar la historia de la pacificación nacional».
Béjar, abogado y doctor en sociología, fundó en 1962 el Ejército de Liberación Nacional, grupo guerrillero inspirado en la revolución cubana, que operó en la selva peruana hasta que fue derrotado militarmente un par de años después.
Detenido en 1966 y tras casi cinco años preso, Béjar fue indultado por el gobierno del general Juan Velasco Alvarado, de quien pasó a ser colaborador.