Lima (AFP) – Perú vivió su primer domingo sin confinamiento en siete meses, luego de que el gobierno levantó la prohibición de salir a las calles en las regiones más afectadas por la pandemia del nuevo coronavirus en momentos que disminuyen los casos.
La medida beneficia a más de 10 millones de personas de las zonas del sur de los Andes, como Cusco, epicentro del turismo por cobijar a la ciudadela inca Machu Picchu.
«Todas las regiones podrán tener la movilidad correspondiente, lo que sí estamos manteniendo, es la prohibición del uso de vehículos particulares los domingos», dijo el presidente Martín Vizcarra el sábado al evocar la medida.
En Cusco, la antigua capital del imperio inca, se ultiman los preparativos para reabrir Machu Picchu el 1 de noviembre a un 30% de su capacidad o 675 turistas por día.
Ahora los 32 millones de peruanos gozan por vez primera de su libertad de movimiento desde marzo, cuando se declaró el estado de emergencia sanitario.
Sin embargo, el gobierno extendió a todo el país la prohibición de usar autos particulares con el fin de limitar las reuniones familiares y sociales, focos de contagios del virus respiratorio.
«Creo que es una buena y sana medida que un día a la semana, los domingos, pueda desarrollarse cualquier actividad, pero que la movilidad sea sin el uso de vehículos particulares», indicó Vizcarra.
Los taxis y el transporte público son los únicos vehículos autorizados los domingos en Perú, junto a motos y bicicletas.
El sur peruano era la última región bajo confinamiento los domingos por las tasas altas de contagios de la covid-19. En el resto del país se había levantado la cuarentena en julio.
Como parte de las nuevas medidas de contención del virus anunciadas a mitad de semana y ante el riesgo de un rebrote, los peruanos tampoco pueden pisar playas ni bañarse en el mar desde este fin de semana.
Perú ha prolongado un toque de queda de cinco horas a partir de las 11 de la noche (04h00 GMT), como parte de una estrategia para mitigar la propagación del virus.
«Es una medida que está ayudando bastante al control del contagio», aseguró el presidente peruano.
Las cifras están en retroceso desde que el 13 de agosto se alcanzó un récord de 277 muertos y 10.143 nuevos contagios tres días después.
Desde entonces, las cifras vienen bajando paulatinamente y en el presente mes el promedio diario de nuevos contagios es de 2.957 y el de decesos 69, según las cifras oficiales.
La pandemia llegó a Perú en marzo y desde entonces se han registrado más de 886.000 casos confirmados y los decesos superan los 34.000. El jueves, por primera vez en siete meses hubo menos de 50 muertos.