Brasilia (AFP) – El presidente de Brasil, Michel Temer, convocó este lunes una nueva reunión con siete ministros para «buscar soluciones» tras los choques vividos este fin de semana entre brasileños e inmigrantes en la frontera con Venezuela.
Según informó la estatal Agencia Brasil, a la reunión, prevista para las 15H00 (18H00 GMT), están convocados el ministro de Defensa, Joaquim Silva e Luna, el de Derechos Humanos, Gustavo Rocha, y el de Presidencia, Eliseu Padilho, entre otros.
Temer ya se reunió de urgencia con varios ministros el domingo para analizar los incidentes del sábado en Pacaraima, una ciudad de 12.000 habitantes en el estado fronterizo de Roraima, cuando residentes atacaron dos campamentos de inmigrantes forzándolos a volver a su país.
El gobierno de Brasil resolvió enviar a la zona 120 efectivos de la Fuerza Nacional para reforzar la seguridad y 36 voluntarios para atender el área de la salud.
La gobernadora de Roraima, Suely Campos, advirtió este lunes que las medidas adoptadas por el gobierno de Temer «aliviarán los impactos» para la población, «pero no resuelven el problema».
Y recordó que el gobierno de su estado solicita desde hace más de un año a Brasilia más recursos económicos, sanitarios, policiales y educativos para enfrentar la ola migratoria de venezolanos que huyen de la grave crisis económica, política y social que vive su país.
Los incidentes del sábado se desataron tras el asalto a un comerciante que resultó herido. Los habitantes de Pacaraima culparon a los venezolanos y en represalia los persiguieron hasta la línea divisoria.
Según las autoridades, tras esos disturbios en Paracaima, vecina con la venezolana Santa Elena de Uairén, unos 1.200 venezolanos regresaron a su país.
Pacaraima ha sentido el impacto de la ola migratoria en los últimos tres años con un aumento de 10% de la población, la mayoría en situación de calle.
Las incertidumbres sobre la situación en Venezuela se incrementaron con la decisión del gobierno de Nicolás Maduro de lanzar desde este lunes nuevos billetes, que restan cinco ceros al bolívar. Queda por ver cuál es el impacto de esa medida en los precios locales y en el comercio transnacional.
Brasil no es el principal destino elegido por los venezolanos. Pero sí es uno de los pocos países de la región que no les exige pasaporte para ingresar.
La Organización de las Naciones Unidas calcula que 2,3 millones de venezolanos dejaron su país en los últimos años.