Tegucigalpa (AFP) – Cientos de policías lanzaron este miércoles bombas de gas lacrimógeno contra miles de docentes, médicos y estudiantes que protestaban en las calles de la capital de Honduras contra dos reformas aprobadas por el Congreso que, según ellos, privatizan los servicios de educación y salud.
Unas 5.000 personas se congregaron en el centro de Tegucigalpa, donde quemaron neumáticos para interrumpir el tránsito, cuando llegaron policías antimotines a lanzarles bombas lacrimógenas con fusiles, observó un equipo de AFP.
En poco minutos, el centro de la ciudad estaba cubierto por una densa capa de humo, mientras los manifestantes se replegaban y luego contraatacaron con piedras a los agentes.
El dirigente magisterial Jaime Rodríguez dijo a periodistas que las protestas, iniciadas la semana pasada sin incidentes, continuarán los próximos días contra «la privatización de la educación y la salud».
Las manifestaciones, convocadas por el Colegio Médico Hondureños (CMH), que tiene 10.000 afiliados, y seis sindicatos magisteriales con 60.000 miembros comenzaron el pasado 26 de abril en demanda de la derogación de dos decretos de «reestructuración» de la educación y la salud.
A juicio de los gremios, a los que se sumaron estudiantes, el gobierno pretende la privatización de ambos sectores y proceder a despidos masivos de profesionales.
Los sindicatos suspendieron las protestas luego que el presidente del Congreso, Mauricio Oliva, convocó a un diálogo para revisar los decretos, pero las reanudaron tras constatar que no serían derogados.