Ginebra (Suiza).- La economía circular, en la que se reutilizan, reciclan y reacondicionan todas las formas de residuos podría generar oportunidades de empleo, según un nuevo informe de la Organización Mundial del Trabajo (OIT).
El Trabajo decente en la economía circular: una visión general de la base de evidencia existente calcula que podrían crearse entre siete y ocho millones de nuevos puestos de trabajo.
En los países en desarrollo se encuentran la gran mayoría de los puestos de trabajo relacionados con esta industria que incluyen ropa, chatarra y aparatos electrónicos obsoletos, entre otros.
Sin embargo, destaca el informe, no existe una investigación sobre el impacto de la economía circular en los trabajadores atípicos, las mujeres, los migrantes, los jóvenes y las poblaciones vulnerables.
“No cabe duda de que una economía circular puede ayudarnos a alcanzar nuestros objetivos climáticos”, dijo Alette van Leur, Directora del Departamento de Políticas Sectoriales de la OIT.
“Sin embargo, siguen sin tenerse en cuenta los vínculos entre la circularidad y la consecución del progreso social y económico”.
Según el informe, el África Subsahariana, Europa Oriental, Oriente Medio y el Norte de África son las regiones menos representadas a pesar de que la mayoría de las actividades de la economía circular se localizan actualmente en el Sur Global.
También destaca que, mientras que el 73 por ciento de los trabajadores de los países de renta baja están empleados en la economía informal, la mayor parte de la investigación se refiere al trabajo formal y regulado.
“El cambio hacia una economía más circular ofrece importantes oportunidades para el mundo del trabajo, como la creación de nuevos puestos de trabajo y de empresas sostenibles”, dijo Van Leur.
Otro aspecto que el informe destaca es la escasez de estudios que examinen si la economía circular puede aliviar la pobreza y beneficiar a las comunidades vulnerables de los países de renta baja y la forma en que puede hacerlo.
“Más que introducir el concepto de circularidad en estas economías, hay que centrarse en abordar los empleos de baja calidad y mal remunerados del sector informal, con condiciones de trabajo peligrosas y exposición a materiales tóxicos, que están asociados a actividades circulares como la gestión de residuos, el reciclaje, la reparación y la reutilización”, dijo Namita Datta, directora de programas del Programa Soluciones para el Empleo Juvenil (S4YE) del Banco Mundial.
Para leer el informe (en inglés), haga clic aquí.