Bogotá (AFP) – Dos soldados murieron y dos resultaron heridos este viernes en un ataque con explosivos atribuido por el ejército colombiano a rebeldes del ELN en la frontera con Venezuela.
«Es una clara evidencia de cómo el ELN trasgrede y viola sistemáticamente los postulados del Derecho Internacional Humanitario con el uso indiscriminado de medios y métodos de guerra de uso ilícito», señaló el mando militar en un comunicado.
Los uniformados patrullaban cerca del oleoducto Caño Limón Coveñas, a la altura del municipio fronterizo de El Tarra, cuando fueron alcanzados por el estallido de un artefacto.
En lo que va del año esa estructura ha sido atacada en 82 ocasiones, provocando graves daños ambientales, según la estatal Ecopetrol.
Con cerca de 1.500 combatientes, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) es la última guerrilla reconocida oficialmente en Colombia, tras el desarme y transformación de las FARC en un partido político, en 2017.
El primer grupo mantuvo negociaciones de paz hasta mediados de este año, cuando llegó al poder el derechista Iván Duque.
El mandatario ha condicionado la reanudación de los diálogos a que el ELN libere a los secuestrados -al menos diez según las autoridades- y suspenda sus «actividades criminales».
Por su parte, los rebeldes guevaristas han acusado al jefe de Estado de querer hacer «trizas» el inconcluso proceso de paz.