Santiago (AFP) – Más de 147.000 venezolanos ingresaron a Chile entre enero y julio de este año, cifra que se acerca a los 177.000 que lo hicieron durante todo el año pasado, de acuerdo a la Policía.
Según un reporte de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) publicado este lunes por el diario La Tercera, entre el 1° de enero y el 31 de julio, 147.429 venezolanos ingresaron a Chile. En todo 2017, habían ingresado al país un total de 177.347 personas de esa nacionalidad.
En el primer semestre, que comprende el período desde el 1° de enero al 30 de junio, el número de venezolanos que ingresaron al país llegaba a 124.501, de acuerdo a un listado de la PDI enviado a la AFP.
En el mismo período, ingresaron a Chile 1.950.546 argentinos, en su mayoría de paso; 940.872 peruanos y 413.242 bolivianos, estos últimos debido al intenso tránsito en la frontera común.
Además, entraron a Chile 287.539 brasileños y 139.109 ciudadanos estadounidenses, principalmente con fines turísticos.
Del total de venezolanos que ingresaron a Chile desde el 16 de abril -cuando el gobierno del conservador Sebastián Piñera impuso la condición- y hasta el 20 de agosto, 9.626 lo hicieron con la llamada «visa de responsabilidad democrática», la que ha sido solicitada en este periodo por 64.932 venezolanos, aunque todavía unas 42.000 se encontraban en trámite.
En el momento del anuncio, que incluyó también la imposición de una visa de turismo para contener la migración haitiana, Piñera había dicho que la medida se adoptaba «tomando en consideración la grave crisis democrática que atraviesa Venezuela, país que acogió a muchos chilenos que buscaban refugio en sus fronteras» durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
La visa, que debe ser exigida en los consulados de Chile en Venezuela, otorga a los venezolanos un permiso de residencia por un año, que les permite acceder a un contrato de trabajo en el país. Ese permiso es prorrogable por otro año adicional antes de poder pedir la residencia definitiva.
«Chile se adelantó al resto de países sudamericanos en implementar la visa. Pese a ser criticada en un principio, ésta ha demostrado ser eficiente para que los venezolanos que tengan problemas puedan emigrar», dijo a La Tercera Rodrigo Ubilla, subsecretario del Interior del gobierno chileno.
La medida fue adoptada en el marco de una nueva política migratoria creada por el gobierno en un intento de «ordenar» la casa tras la aceleración en el flujo de extranjeros. En los últimos cuatro años el número de migrantes pasó de 400.000 a cerca de 1,1 millones, en un país de 17 millones de habitantes.
La ONU señala que más de 2,3 millones de venezolanos viven en el extranjero (7,5% de la población). De ellos, más de 1,6 millones salieron de su país a partir de 2015 por el recrudecimiento de la crisis económica y política de la otrora próspera nación petrolera, según la organización.