México (AFP) – El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, rechazó este lunes que sus hijos influyan en su gobierno, luego de que el mayor de ellos fuera exhibido viviendo en una mansión en Houston, Texas.
«En este gobierno no tienen influencia mis hijos, no se le da contrato a ningún recomendado», dijo el mandatario durante su habitual rueda de prensa matutina.
La semana pasada, una investigación de la oenegé Mexicanos contra la Corrupción señaló que José Ramón López Beltrán, el mayor de los cuatro hijos de López Obrador, ha ocupado con su esposa dos residencias en Houston, Texas, con valor de más de un millón de dólares cada una y que además utiliza una camioneta Mercedes-Benz para trasladarse.
La investigación señaló que el estilo de vida de López Beltrán contradice la austeridad que pregona López Obrador, quien desde que estaba en campaña fustigaba a funcionarios de otros gobiernos acusando que vivían con lujos y derroche.
López Beltrán está casado con Carolyn Adams, quien según versiones de la prensa mexicana labora en la industria petrolera.
López Obrador respondió que la esposa de su hijo «tiene dinero».
«Ellos se casaron y al parecer la señora tiene dinero, pero no tiene nada que ver con el gobierno, ni un contrato, ni una recomendación, no somos iguales (a otros gobiernos)», dijo.
López Obrador llegó a la presidencia de México de 2018 prometiendo austeridad en el gobierno y acabar con la corrupción que habían dejado administraciones anteriores.
Desde que era alcalde de Ciudad de México (2000-2005), buscaba mostrar un estilo de vida austero y se trasladaba en un auto compacto. Ya como presidente, anunció que no viviría en la residencia oficial de Los Pinos, que convirtió en un museo, y viaja en vuelos comerciales.
Sin embargo, sus familiares se han visto envueltos en polémica.
En 2020 se divulgaron videos de Pío López Obrador, un hermano del presidente, recibiendo dinero en efectivo de David León, quien en ese momento asesoraba al gobierno del sureño estado de Chiapas y ya en el gobierno actual dirigió Protección Civil nacional.
En respuesta a esas revelaciones, López Obrador dijo que no protege a nadie y que si su hermano era responsable de un ilícito debía ser castigado.