Cuernavaca (México).- En una fusión única de historia y naturaleza, el Jardín Etnobotánico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Morelos, se apresta a celebrar su quincuagésimo aniversario con una significativa adición: un humedal diseñado para enriquecer su diversidad biológica y fortalecer su papel en la conservación ambiental. 

Este ambicioso proyecto, ubicado en el histórico barrio de Acapantzingo en Cuernavaca, no solo revitalizará la fisonomía paisajística del área, sino que también introducirá una colección de especies acuáticas en el contexto del programa «Casa de Saberes» de la Red Nacional de Jardines Etnobiológicos.

Desde mayo de 2024, los trabajos de construcción del humedal han transformado áreas antes subutilizadas del predio, integrando técnicas de fitodepuración que imitan la construcción de chinampas tradicionales. 

Este método permitirá al humedal actuar como un filtro biológico, purificando el agua contaminada que cruza el terreno, mientras proporciona un hábitat vital para la flora y fauna local.

La coordinadora del jardín, Lizandra Salazar Goroztieta, y el investigador José Luis García Tavera del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt), han supervisado este desarrollo. 

El Jardín Etnobotánico de Morelos se renueva con un innovador humedal para sus 50 años 2
Parte de una iniciativa científica permanente de desarrollo de ecotecnologías prototipo, y de estrategias de saneamiento, remediación y restauración ecológica. Foto CINAH Morelos

Salazar Goroztieta destaca que el cierre temporal del jardín, que reabrirá el próximo 4 de noviembre, es una pausa necesaria para facilitar la culminación de este proyecto que promete ser un modelo de gestión hídrica sustentable y restauración ecológica dentro de la Red Nacional de Jardines Etnobiológicos.

El nuevo humedal no solo manejará el agua de manera eficiente, especialmente durante la temporada de sequía, sino también reciclará nutrientes y compuestos contaminantes a través de un sistema de recirculación de agua. Además, contará con un jagüey que retendrá el agua en tratamiento para su uso en el riego del jardín.

Durante el último año, el equipo ha trabajado en la biorremediación del suelo y la estabilización de la vegetación que, para noviembre, estará completamente integrada al paisaje, ofreciendo a visitantes una experiencia educativa sobre los procesos ecológicos y la etnobotánica.

Este espacio no solo conserva la Colección Nacional de Plantas Medicinales, que ha sido parte del jardín por 30 años, sino también alberga importantes colecciones de plantas alimenticias, condimenticias, ornamentales, cactáceas y orquídeas silvestres. Además, se destaca por su herbario y las actividades de investigación y difusión de prácticas socioculturales relacionadas con el uso de recursos fitogenéticos.

En preparación para la reapertura, se han llevado a cabo labores de mantenimiento, como la poda de 25 árboles bajo la supervisión del arborista certificado Juan Pablo Plata Marín. 

El Jardín Etnobotánico de Morelos se renueva con un innovador humedal para sus 50 años
El Jardín Etnobotánico del Centro INAH Morelos enriquece su paleta vegetal con la construcción de un humedal. Foto CINAH Morelos

Los residuos orgánicos de estas podas se han reutilizado para delimitar áreas y enriquecer los suelos del jardín, demostrando el compromiso del Jardín Etnobotánico con las prácticas de sostenibilidad.

Con su reapertura en noviembre, el Jardín Etnobotánico no solo celebrará su aniversario con una infraestructura renovada, sino que también reafirmará su rol como líder en la conservación del patrimonio biocultural y la educación ambiental en la región. 

Este proyecto representa un paso adelante hacia la integración de soluciones ecológicas en la gestión de espacios verdes urbanos, destacando el valor de la etnobotánica y la medicina tradicional en el contexto moderno.