Ciudad de Panamá (AFP) – El expresidente panameño Ricardo Martinelli podría verse más comprometido en el juicio que afronta por cargos de espionaje debido a información personal de sindicalistas halladas en la casa de un antiguo subalterno, señaló la fiscalía este martes en el marco del sonado caso.
«Ya estamos tocando el nervio, el punto neurálgico donde ya se están revelando elementos» comprometedores para Martinelli, dijo este martes el fiscal del caso, Ricaurte González.
La fiscalía presentó esa prueba el lunes en el juicio que se desarrolla contra Martinelli, quien se mostró inquieto en tribunales ante las evidencias presentadas.
Los documentos encontrados en la residencia de quien fue director del Consejo de Seguridad de Panamá durante su gobierno (2009-2014), Alejandro Garuz, tenían información sensible recabada sobre sindicalistas almacenada en carpetas en dispositivos electrónicos. En ellas constaban los nombres de los presuntamente espiados, sus actividades políticas y preferencias personales.
Las pruebas datan de 2015, pero fueron presentadas este lunes en el juicio.
«Se hallaron grabaciones y elementos íntimos que no habían sido autorizados judicialmente. Ya esto evidentemente va marcando el surco que lleva hacia la vinculación del señor Martinelli» en el espionaje de diferentes personalidades opuestas a su gobierno, sostuvo el fiscal González.
Martinelli está siendo juzgado por presuntamente espiar, entre 2012 y 2014, a unos 150 opositores a su gobierno, por lo que la fiscalía ha pedido una pena de 21 años de cárcel.
El expresidente, de 67 años, está acusado de crear y liderar «un aparato organizado de poder» al margen del Estado para la «vigilancia y seguimiento de personas» críticas con su gestión.
– «Fue muy grave» –
Garuz y otro exdirector del Consejo de Seguridad del gobierno de Martinelli, Gustavo Pérez, fueron condenados a cuatro años de cárcel por delitos contra la inviolabilidad del secreto y derecho a la intimidad.
Sin embargo, los abogados del exmandatario desvincularon a su defendido de estos hallazgos.
«La teoría de la acusación no vinculaba actuaciones del señor Garuz con el señor Martinelli», afirmó uno de sus abogados, Carlos Carrillo.
«Más aún, el señor Garuz hizo las explicaciones correspondientes en el proceso en que fue parte y explicó y sustentó esas situaciones, y no vinculaban en forma alguna a Ricardo Martinelli, sino a instituciones extranjeras», añadió Carrillo.
Por el contrario, la fiscalía y los abogados querellantes insisten en que Garuz rendía cuentas a Martinelli en su condición de jefe del aparato de seguridad del Estado y viceministro de Seguridad.
«Aquí hay una línea de mando que no podemos ignorar, a quien ellos (Garuz y Pérez) le tenían que dar respuesta de todas las operaciones que se realizaban en el Consejo de Seguridad es al presidente Martinelli», dijo este martes el abogado querellante Nicomedes Castillo.
Debido a la información personal y sensible que se habría obtenido de las víctimas, el tribunal decidió que solamente las partes podrán acceder a los siete cuadernillos del expediente durante un plazo de siete días y sin la posibilidad de dar detalles del mismo.
«Lo que pasó en nuestro país fue muy grave, yo he tenido acceso a esos 7 cuadernillos y es lamentable», declaró el fiscal González.
– «Hubo espionaje» –
En este caso hay más de 3.200 hojas con información y conversaciones de las posibles víctimas de espionaje.
Martinelli fue extraditado desde Estados Unidos en junio de 2018, un año después de ser detenido en Miami, donde residía desde 2015 para evadir a la justicia panameña.
«Esto se va a tener que debatir dentro del proceso, y no lo que digan cada una de las partes. Lo cierto es que hubo interceptación», manifestó a la AFP el abogado independiente y especialista en cuestiones penales Ernesto Cedeño.
«Ahora tendrá que ver con la sagacidad probatoria de ambas partes, donde la defensa de Martinelli dirá que él no tenía nada que ver y los querellantes y el fiscal (argumentarán) que sí estaba al tanto, que dio la instrucción o no revisó adecuadamente», añadió.