El Alto (Bolivia) (AFP) – Los controladores aéreos de Bolivia iniciaron este miércoles una huelga por demandas laborales, lo que paralizó los vuelos nacionales e internacionales y dejó a cientos de pasajeros varados y frustrados tres días después de las elecciones.
«Tenía el vuelo a las 08H00 a Santa Cruz (este), porque falleció mi hermano y hoy es su entierro. ¿Qué te puedo decir, lo mal y enojada que me siento por no poder ir a despedir a mi hermano en el último momento?», dijo a la AFP Ana María Núñez, ama de casa, en la terminal internacional de El Alto, que sirve a La Paz.
El sindicato que incluye a los controladores aéreos (Aasana) inició el paro a las 00H00 locales (04H00 GMT) de este miércoles, suspendiendo los vuelos en todos los aeropuertos del país, incluidos internacionales en El Alto, Santa Cruz y Cochabamba, indicó a la AFP el dirigente Alvaro Guzmán.
«Desde hace dos años no nos reconocen como trabajadores amparados en la ley general de trabajo», que otorga beneficios como jubilación y pensión para las familias en caso de deceso de un empleado, explicó Guzmán en la oficina del sindicato en el aeropuerto de El Alto.
Son 1.200 controladores los que trabajan en los 39 aeropuertos y aeródromos del país andino, según Aasana.
En declaraciones al canal Red Uno, el ministro de Obras Públicas, Iván Arias, calificó la medida como una «total intransigencia» de los líderes sindicales, con los que negociará este miércoles para tratar de que acepten reanudar las operaciones.
«Estos problemas que tienen entre Aasana y el gobierno son temas políticos, no se dan cuenta que nos están perjudicando», dijo Núñez.
Un funcionario de la aerolínea boliviana BOA dijo que los vuelos podrían reprogramarse a partir del viernes.
Los aeropuertos bolivianos retomaron sus operaciones en junio, tras quedar paralizados en marzo por las restricciones por la pandemia de coronavirus.
Planes frustrados
El paro amenaza con dejar varados a decenas de observadores internacionales y periodistas enviados a Bolivia a las elecciones del domingo, en las que el economista Luis Arce, delfín del expresidente Evo Morales, se impuso en primera vuelta de manera contundente ante el centrista Carlos Mesa.
En todos los vuelos decía «cancelado» en las pantallas de la terminal de El Alto, mientras decenas de desanimados pasajeros deambulaban con sus maletas, algunos esperanzados con que termine el paro en las próximas horas o tratando de idear una alternativa para llegar a sus destinos.
«Todo este tiempo de pandemia no he podido viajar a visitar mi familia y ahora que puedo viajar justo no hay vuelos», dijo Carolina Farfán, una servidora pública, que debía abordar un vuelo para ir a Tarija (sur).
Otros viajeros, como Rubén Millar y Esperanza Murilla, vieron frustradas sus reuniones de trabajo.
«Estábamos yendo a Santa Cruz para un tema de negocios y ya no se puede viajar ni nada hasta nueva información», dijo Millar, un ingeniero comercial de 27 años.
«Voy a tener que alojarme en algún lugar (…) hasta que se solucione o ir básicamente vía terrestre, no hay otra», agregó decepcionado.
Mientras a Murilla, una sindicalista de 58 años, el paro de controladores aéreos le tomó por sorpresa cuando iba a viajar a la ciudad central de Cochabamba.
«Esta tarde tenemos asamblea general, pero nos vemos totalmente perjudicados por esta situación», afirmó.