Caracas (AFP) – El líder opositor Juan Guaidó llamó este martes «cínico» al presidente Nicolás Maduro, quien propuso adelantar los comicios parlamentarios para resolver la crisis política en Venezuela, donde ambos mantienen una pugna por el poder.
«Es muy cínico insinuar que está dispuesto a someterse a unas elecciones cuando se las robó en el 2018. Disociación, locura», dijo el jefe del Legislativo, único poder en manos de la oposición, al intervenir en la cámara.
En la sesión, la mayoría opositora del Parlamento aprobó un acuerdo que tilda de «farsa» las votaciones del 20 de mayo de 2018, en las que Maduro fue reelegido para un segundo mandato (2019-2025).
Recordando que el congreso declaró ilegítimo al gobernante socialista, el texto llama a «elecciones democráticas» luego del «cese de la usurpación».
Maduro reiteró el lunes su propuesta de adelantar los comicios legislativos, que deben realizarse en diciembre de 2020, como una forma de solventar la crisis, aunque sin fijar una fecha.
El llamado del mandatario se produjo ante miles de seguidores convocados al cumplirse un año de las presidenciales, adelantadas por la oficialista Asamblea Constituyente, que fueron desconocidas por la oposición, así como por Estados Unidos, la Unión Europea y una docena de países latinoamericanos.
«¡Yo quiero elecciones ya!», expresó Maduro, a quien Guaidó, considerado presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países, intenta sacar del poder mediante masivas manifestaciones y quebrándole el apoyo militar, sin descartar una eventual intervención militar estadounidense.
En su discurso, Guaidó cargó también contra la Constituyente, que el lunes aprobó seguir actuando como poder plenipotenciario hasta el 31 de diciembre de 2020.
«Es cínico decirle a Venezuela que van a ampliar un período de una Constituyente que no existe, cuando en los últimos tres meses no han hablado ni una vez del problema del agua, de la gasolina», dijo Guaidó sobre el órgano, que la oposición considera ilegal.
En la práctica, la Constituyente ha sustituido las funciones del Parlamento, declarado en desacato por el máximo tribunal, acusado de servir al gobierno.
Guaidó emplazó nuevamente a la Fuerza Armada a dar la espalda a Maduro, a quien el alto mando ratificó su respaldo tras la fallida rebelión de un grupo de militares en su contra, encabezada por el líder opositor el pasado 30 de abril.
«Llegó el momento, señores de la Fuerza Armada, de dar un paso, no estamos pidiendo ya nada, no tienen que reflexionar nada (…) Es momento de actuar, de hablar, de ponerse del lado de la Constitución», dijo Guaidó, en una sesión a la que la Guardia Nacional, que resguarda el Palacio Legislativo, prohibió el acceso a la prensa.