Chicago (AFP) – Un grupo de abogados estadounidenses presentó el martes una demanda para liberar a una niña mexicana de 10 años de edad que padece parálisis cerebral y fue detenida y sacada de un hospital de Texas luego de someterse a una cirugía.
La Unión Estadounidense de Derechos Civiles (ACLU), que representa a Rosa María Hernández, advirtió que demandaría al gobierno del presidente Donald Trump si la niña no es liberada en el correr del martes.
«Las acciones del gobierno son ilegales, crueles y arriesgan impedir que los padres de una niña enferma le busquen tratamiento», afirmó el abogado de la ACLU, Michael Tan, en un comunicado.
Hernández sufre de parálisis cerebral, una enfermedad de desarrollo del cerebro que afecta el movimiento del cuerpo y el control sobre los músculos.
Su madre la llevó ilegalmente a Estados Unidos desde México cuando tenía tres meses de edad para que recibiera mejor cuidado médico, según reportes de medios. Cruzaron de Nuevo Laredo a Laredo, ciudades adyacentes en la frontera.
La niña viajó la semana pasada en ambulancia a la cercana ciudad de Texas para una cirugía, acompañada por un adulto de la familia que es ciudadano estadounidense.
Agentes de inmigración los pararon en una alcabala y los siguieron al hospital, donde monitorearon su tratamiento y la tomaron en custodia una vez recibió el alta médica, según la ACLU.
El arresto causó indignación y cuestionamientos a las prioridades del gobierno de Donald Trump, frente a las crecientes detenciones de emigrantes indocumentados.
Trump ha prometido enfocarse en aquellos que cometan crímenes mientras están ilegalmente en Estados Unidos.
En tanto, se han recaudado más de 26.000 dólares en la plataforma GoFundMe para colaborar con los gastos legales de Hernández.