Ciudad de Panamá (AFP) – El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, analiza modificar las reformas constitucionales impulsadas por su gobierno para frenar las protestas que se han desatado en el país centroamericano, en medio del inicio de tibias negociaciones con sectores opositores.
Cortizo «está haciendo un análisis» sobre las posibles modificaciones a la propuesta inicial de reformas presentada por el órgano ejecutivo, manifestó este jueves el vicepresidente de Panamá, José Gabriel Carrizo.
Según el funcionario, el mandatario recibió una propuesta de un equipo de abogados para estudiar la posibilidad de modificar los artículos más polémicos del proyecto de reforma, elaborado inicialmente por un consejo de múltiples sectores para luchar contra la corrupción y fortalecer las instituciones.
«La democracia es escuchar, dialogar y buscar consensos», afirmó Cortizo en su cuenta de Twitter.
Las declaraciones del mandatario se producen tras los primeros acercamientos entre opositores a las reformas y altos funcionarios.
Cortizo recibió a un grupo de estudiantes el miércoles en el Palacio Presidencial, mientras que otro grupo fue atendido este jueves por el presidente de la Asamblea Nacional, el oficialista Marcos Castillero.
«Lo que se busca es que durante el mes de noviembre y diciembre se aproveche el tiempo creando estas mesas de trabajo para que exista mayor participación» ciudadana, señaló Carrizo.
Hace 10 días que Panamá es foco de protestas, principalmente impulsadas por jóvenes, por la aprobación de la Asamblea Nacional del proyecto gubernamental para reformar la Constitución.
Las reformas volverán a ser discutidas en 2020 por la Asamblea, órgano legislativo unicameral de mayoría oficialista, para luego pasar a un referéndum.
El descontento social se produce porque los diputados, muy cuestionados por distintos escándalos, realizaron cambios al texto original.
Los manifestantes piden ahora retirar esa versión modificada y discutir un nuevo texto porque, a su juicio, la reforma propuesta favorece la impunidad y no mejora las condiciones de vida.
Entre los cambios está el reconocimiento del matrimonio únicamente entre un hombre y una mujer, un tema que no había sido inicialmente incluido.
Las protestas han dejado más de un centenar de detenidos, que ya han sido liberados, y denuncias por violaciones de derechos humanos por parte de la policía.
«Los reclamos de muchos jóvenes son legítimos» porque al gobierno también le «preocupa» el fortalecimiento institucional, dijo Carrizo en conferencia de prensa tras la reunión del gabinete.