Montevideo (AFP) – El excomandante en jefe del Ejército de Uruguay Guido Manini Ríos lanzó su candidatura presidencial y acusó al presidente Tabaré Vázquez de querer «eludir su responsabilidad» en medio de un escándalo que envuelve al mandatario por un caso de derechos humanos.
«Me sorprende y me duele que el señor presidente de la República quiera eludir su responsabilidad», dijo Manini Ríos en conferencia de prensa, luego de que el gobierno omitiera enviar a la justicia ordinaria los antecedentes de un caso juzgado en un tribunal de honor militar, en el que un torturador condenado por 28 homicidios admitió deshacerse del cuerpo de un militante de izquierda en 1973.
El escándalo envuelve a Vázquez luego de que el diario El Observador publicara la confesión del exmilitar detenido José Gavazzo, quien confesó haber arrojado a un río el cuerpo del militante de la guerrilla tupamara MLN Roberto Gomensoro poco antes del inicio de la dictadura.
Vázquez cesó en sus funciones al ministro de Defensa Jorge Menéndez, al viceministro y a seis generales que participaron de un tribunal de honor y otro de alzada, alegando que no enviaron las confesiones de Gavazzo a la Justicia ordinaria, como lo requiere la reglamentación.
Sin embargo, con el paso de las horas, el presidente admitió que él mismo no había leído las actas del caso a pesar de que homologó el fallo del tribunal militar, el cual solo condenó que Gavazzo haya dejado que otro colega cumpliera prisión por el crimen de Gomensoro a sabiendas de que era inocente.
El tribunal no consideró deshonroso para la institución militar el crimen en sí mismo, algo que en su homologación esgrime el gobierno. Pero a pesar del matiz, el presidente terminó firmando de puño y letra el aval al fallo militar, según consta en el documento accesible en la web de la Presidencia.
«Yo no homologué lo que había actuado el tribunal», se defendió Vázquez el martes, y alegó que no leyó específicamente los expedientes.
– Escándalo –
Al publicarse el artículo periodístico, Vázquez barrió de un plumazo con la cúpula del Ministerio de Defensa y la militar. Incluso fue pasado a retiro el recién nombrado jefe del Ejército José González, quien participó del tribunal de honor y reemplazaba a Manini Ríos, cesado por Vázquez el 12 de marzo por críticas a la Justicia.
«Me duele muchísimo la forma canallezca en la cual fue cesado el ministro de Defensa nacional que está gravemente enfermo», lanzó este miércoles Manini Ríos en una dura crítica al presidente de la República. No haber leído el expediente «es grave», añadió. «A quien debería haber relevado era a otro», sostuvo sin dar nombres.
La palabra de Vázquez ha quedado en entredicho, agregando leña al fuego de un escándalo que no para de crecer en el último año de su mandato y en un partido, el Frente Amplio, que defiende la búsqueda de verdad y justicia para las víctimas de la dictadura.
Mientras el mandatario señaló en una entrevista que el entonces ministro Menéndez se llevó el expediente a su despacho para hacer la denuncia a la Justicia ordinaria, la carta de renuncia del exjerarca fechada el 1 de abril publicada por el diario El País señala específicamente que «el expediente fue dejado en Presidencia de la República para su análisis, estudio y evaluación sobre la procedencia o no de homologar (ndlr: validar) los fallos del tribunal de honor».
La candidatura del militar retirado Manini Ríos se daba como un hecho en Uruguay al momento de ser cesado por Vázquez, con quien ya había mantenido discrepancias. Y aunque durante su alocución de este miércoles se ocupó de mencionar los problemas de seguridad y trabajo del país, ante consultas de la prensa defendió la actuación de los militares durante el proceso judicial castrense y negó cualquier intención de ocultar información.
«No hubo un solo ocultamiento», sostuvo. «Me consta que el señor ministro lo elevó al presidente todo ese expediente» al que no le faltaba «una sola línea».
Manini Ríos, de 60 años, con 46 años de trayectoria en el Ejército, lanza su candidatura a las presidenciales de Uruguay en 2019 por el nóvel partido Cabildo Abierto.