Tonalá (México) (AFP) – Autoridades de México exhumaron este martes más cadáveres de una fosa clandestina hallada el lunes a las afueras de Guadalajara, una importante ciudad del violento estado de Jalisco (oeste), sumando un total de 16 cuerpos, informó la fiscalía local.
Se trata de los cuerpos de 14 hombres y dos mujeres que presentan un proceso de putrefacción de más de una semana, aseguró la fiscalía de Jalisco, que dio por concluido el operativo de excavación.
El hallazgo de la fosa ocurrió en la mañana del lunes en un terreno ubicado en el municipio de Tonalá, suscitando el horror entre los habitantes de esta humilde zona de la periferia de Guadalajara.
«Nosotros vimos que primero habían hecho el reporte como de un muerto, estaba como salido, y ese lo sacaron y ya después fueron encontrando más, y así sucesivamente», relató a AFP un joven de 19 años que pidió identificarse sólo como Ángel.
«Yo tengo miedo por mis hijos. Uno no se mete en eso. Del trabajo a casa y de la casa al trabajo, solamente», dijo por su parte Brenda, de 31 años, quien vive a unas casas de la fosa.
Con este hallazgo, suman 71 cadáveres encontrados desde junio en fosas clandestinas en la zona metropolitana de Guadalajara.
En esta ciudad, la segunda más poblada de México, la violencia se ha acentuado desde marzo del año pasado tras la fractura al interior del cártel local Nueva Generación, uno de los más poderosos de México, según autoridades.
Uno de los episodios más estremecedores estalló a finales de septiembre cuando el gobierno local apiñó en un camión a cientos de cadáveres sin identificar, víctimas de la creciente criminalidad.
En mayo, un alto funcionario estatal sobrevivió a un ataque a balazos a plena luz del día, en el centro de Guadalajara.