San José (AFP) – Entre el entusiasmo de los alumnos y los temores de los padres, millares de estudiantes de escuelas y colegios públicos de Costa Rica regresaron este lunes a clases presenciales parciales, después de casi un año de lecciones a distancia por la pandemia.
Son 1,19 millones de niños y jóvenes inscritos en el sistema educativo público, que volvió a abrir sus puertas bajo un modelo que combina lecciones presenciales y a distancia.
Algunos centros de enseñanza privada habían reiniciado las clases presenciales una semana antes.
Yustin, un niño de quinto grado de la escuela Buenaventura Corrales, en el centro de San José, contó que en el primer día les explicaron los protocolos sanitarios: pasar por una alfombra para desinfectar los zapatos, tomarse la temperatura y aplicarse alcohol en gel antes de entrar al aula.
«Estuvo muy bonito, pero fueron muy pocas horas y algunos compañeros lastimosamente no vinieron, les toca venir mañana» martes, contó al salir de clases. Lleva el rostro cubierto por una mascarilla, como manda la norma.
El reinicio de lecciones presenciales se dio en momentos que los casos de covid-19 muestran un marcado declive en este país de cinco millones de habitantes, que ya inició una campaña de vacunación para trabajadores de salud y seguridad así como para adultos mayores.
Después de un poco de más de 1.000 casos diarios de contagios de covid-19 a inicios de enero, Costa Rica ha registrado entre 400 y 500 casos diarios en las últimas tres semanas.
Temor y entusiasmo –
Sin embargo, esos números no convencieron a algunos padres de familia, preocupados de que sus hijos se contagien.
«En mi caso he decidido no enviar a mis hijas a la presencialidad del curso lectivo para preservar su salud y la de mi familia», dijo Luisa Angulo, en un video divulgado por el canal de TV Repretel.
Angulo consideró que los niños pequeños no tienen noción del riesgo que corren por incumplir los protocolos sanitarios, y se exponen al contagio del coronavirus.
«Si bien los casos por covid han tenido una reducción considerable, no es un número que nos dé tranquilidad», sostuvo.
Pero la vuelta a las clases presenciales fue recibida con entusiasmo por muchos jóvenes que se reencontraron con sus compañeros.
«Estoy agradecida de volver a clases presenciales para compartir con mis compañeros y poner en práctica la nueva modalidad presencial-virtual. Le vamos a sacar el máximo provecho», aseguró la estudiante Zeidy Huete, del Colegio Técnico Profesional de la localidad de Purral, en el noreste del área metropolitana.
En ese colegio se celebró la ceremonia oficial de inicio de clases, que aplica rigurosas normas de distanciamiento y aseo para evitar los contagios de covid-19.
«Este regreso seguro a clases, con todos los protocolos sanitarios requeridos y con una modalidad de educación combinada, es parte de nuestro compromiso por luchar por una educación de calidad para todas las personas», expresó en la ceremonia el presidente Carlos Alvarado.
A su vez, la viceministra de Educación, Melania Brenes, indicó que los meses de febrero y marzo servirán de prueba para ampliar la cantidad de alumnos que pueden volver a las clases presenciales.
El regreso de los alumnos de Costa Rica fue un aliciente para los cerca de 8.000 transportistas de estudiantes, que quedaron sin empleo en 2020 por el cierre de los centros de enseñanza.
«Hoy es un día de fiesta, hoy volvemos a brindar el servicio a nuestros clientes, cumpliendo todos los protocolos que nos piden las autoridades», dijo en un video el transportista Stanley Sandoval, quien pidió a los padres vigilar el cumplimiento de las normas sanitarias.