San José (AFP) – España mantendrá su cooperación con Nicaragua pese a las denuncias de represión contra el gobierno del presidente Daniel Ortega, aunque suspenderá la ayuda para las fuerzas de seguridad, anunció este viernes el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez.
«Vemos con extraordinaria preocupación lo que ocurre en Nicaragua. Nuestro compromiso es no tanto pensar en el régimen, sino en los nicaragüenses. Nuestra voluntad es continuar la cooperación con Nicaragua», declaró Sánchez en Costa Rica.
En una conferencia de prensa junto al presidente costarricense, Carlos Alvarado, Sánchez fue consultado si España mantendría la ayuda para las fuerzas de seguridad de Nicaragua, a las que se atribuyen una ola represiva que ha dejado más de 300 muertos, numerosos detenidos, desaparecidos y miles de migrantes.
«Si hay elementos de la cooperación que pueden reforzar la capacidad represiva del régimen, es la primera noticia que tengo. La orden es que si esto ocurre, no vuelva a suceder», aseguró Sánchez.
Los dos gobernantes insistieron en la necesidad de buscar una salida negociada a la crisis en Nicaragua, desatada en abril con protestas contra una reforma de la seguridad social, pero que tras la represión se convirtieron en un clamor por la salida de Ortega del poder.
«Es en los foros multilaterales que debe abordarse esta situación», manifestó el presidente costarricense, mientras que el español dijo que su gobierno respalda a la Organización de Estados Americanos (OEA) como mediador en Nicaragua.
La crisis en el país centroamericano provocó un flujo de migrantes que huyen de la represión y la falta de empleo, principalmente a Costa Rica, que ha recibido miles de solicitudes de refugio.
«Costa Rica hará uso de su cuerpo legal para proteger a las personas que han ingresando con solicitud de refugio», sostuvo Alvarado, quien rechazó el pedido de Ortega de que se le entregue una lista de los solicitantes de refugio.
«Está fuera de lugar esta petición del señor Ortega, absolutamente fuera de lugar», enfatizó Alvarado.
Sánchez dijo que su país apoyaría a Costa Rica en la atención de los nicaragüneses, y recordó que España vive una situación similar con la llegada de migrantes, principalmente africanos.
Sánchez concluyó en Costa Rica su primera gira latinoamericana como jefe de gobierno, después de visitar Chile, Bolivia y Colombia.