París (Francia).- La educación mundial enfrenta una crisis sin precedentes. Recientes datos de la UNESCO evidencian que, a pesar de los esfuerzos anteriores, hay 6 millones más de niños y jóvenes sin escolarizar desde 2021.
Este aumento representa un retroceso significativo en los esfuerzos globales por garantizar una educación de calidad para todos.
“La educación se encuentra en estado de emergencia”, dijo Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO.
“Aunque en las últimas décadas se han realizado esfuerzos considerables para garantizar una educación de calidad para todos, los datos de la UNESCO demuestran que el número de niños sin escolarizar está aumentando. Los Estados deben movilizarse urgentemente si no quieren vender el futuro de millones de niños”.
¿Qué ha conducido a este alarmante aumento?
Este aumento en el número de niños sin escolarizar se debe en parte a la exclusión masiva de niñas y mujeres jóvenes de la educación en Afganistán.
Sin embargo, también refleja un estancamiento generalizado en el progreso educativo en todo el mundo. Este retroceso socava directamente el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 (ODS 4) de la ONU, que busca proporcionar una educación de calidad para todos para el año 2030.
Si los países no cumplen con sus metas nacionales del ODS 4, se perderán oportunidades cruciales.
Más de 6 millones de niños en edad de ingresar a la escuela primaria no estarán recibiendo educación preescolar, y 58 millones más de niños, adolescentes y jóvenes quedarán excluidos del sistema educativo.
Además, al menos 1,7 millones de docentes de primaria no habrán recibido la formación necesaria.
Compromisos que deben traducirse en acciones
Hace un año, 141 países se comprometieron en la Cumbre sobre la Transformación de la Educación de la ONU a transformar sus sistemas educativos para acelerar el progreso hacia el ODS 4.
Sin embargo, es crucial que estos compromisos se traduzcan en acciones concretas. El tiempo apremia, y para alcanzar el ODS 4, es necesario matricular a un niño cada dos segundos hasta 2030.
Esto significa que se requiere un esfuerzo sin precedentes para aumentar la matriculación en la educación infantil y mejorar las tasas de finalización de la enseñanza primaria.
El ritmo de progreso es insuficiente
El Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo de la UNESCO de 2023 revela que el progreso desde 2015 ha sido lento.
El porcentaje de niños que completan la educación primaria ha aumentado en menos de un 3%, y solo el 87% logra finalizarla. Mientras tanto, solo el 58% de los jóvenes completa la educación secundaria.
A nivel global, las tasas de alfabetización de los jóvenes han mejorado mínimamente, y la participación de los adultos en la educación ha disminuido en un 10%, en gran parte debido a la pandemia de COVID-19.
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