Buenos Aires (AFP) – China y Estados Unidos pactaron una tregua en su «guerra comercial» durante una «exitosa» reunión este sábado en Buenos Aires entre los presidentes Donald Trump y Xi Jinping.
Estados Unidos decidió suspender «por 90 días» la aplicación de nuevos aranceles a las importaciones de China, prevista para el 1 de enero. «Si al cabo de ese lapso, las partes no logran un acuerdo, los aranceles que se ubican en 10% pasarán a 25%», precisó la Casa Blanca en un comunicado al finalizar el encuentro al margen de la cumbre del G20 en la capital argentina.
«Fue un fantástico y productivo encuentro, con posibilidades ilimitadas para Estados Unidos y China», reaccionó Trump, según el comunicado.
La llamada «guerra comercial» se inició cuando Trump impuso aranceles punitivos a importaciones chinas por valor de 250.000 millones de dólares anuales. La medida provocó represalias de Pekín a 110.000 millones de bienes procedentes de Estados Unidos.
Washington acusa a Pekín de prácticas desleales, mientras que el gigante asiático reprocha a la primera economía mundial de predicar el «unilateralismo», el «proteccionismo» y la «hegemonía económica».
Esta «guerra comercial» es potencialmente devastadora para la economía mundial, advirtieron los líderes de las 20 potencias económicas reunidos en Buenos Aires.
«Todos sabemos que estamos indirectamente impactados por el hecho de que las relaciones sino-estadounidenses no son lo buenas que el orden mundial requiere», destacó la canciller alemana Angela Merkel.
– «Problemas» en el comercio –
Justamente el comunicado final del G20 evocó los «problemas en el comercio» sin condenar el proteccionismo, el asunto más espinoso en el conflicto entre Estados Unidos y China.
Tenemos la «necesidad urgente de suavizar las tensiones comerciales», destacó la directora general del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde. De no revertir esta situación, habrá consecuencias en la economía mundial, añadió.
Todos los jefes de Estado y de gobierno del G20, aunque con excepción de Estados Unidos, como era de esperar, se comprometieron a alcanzar los objetivos del Acuerdo de París para enfrentar el calentamiento global, según el comunicado final.
«Los firmantes del Acuerdo de París se comprometieron con su implementación», señala el comunicado. Sin embargo, Estados Unidos dejó asentada en la declaración su decisión de retirarse del Acuerdo.
El presidente estadounidense, quien pone en duda el cambio climático, retiró a su país de los acuerdos ambientales de París en junio de 2017, poco después de llegar a la Casa Blanca.
– No todo fueron rosas –
Lo cierto es que esta cumbre que por primera vez se celebró en suelo sudamericano fue una de las más tensas en la joven historia de este foro.
Si en su primer comunicado en Washington, donde el grupo se creó hace diez años, los miembros del G20 destacaban «la importancia de rechazar el proteccionismo», en 2018, en plena guerra arancelaria, ni siquiera mencionaron el tema.
Trump suspendió una reunión con el presidente ruso, Vladimir Putin, luego de que fuerzas rusas apresaran a la tripulación de tres navíos militares ucranianos frente a las costas de Crimea.
Pero también fue anulada en medio de la controversia en Estados Unidos por nuevas revelaciones en la investigación sobre una presunta injerencia de Rusia en la campaña presidencial estadounidense de 2016.
Putin lamentó que Trump haya cancelado la cita y consideró que un encuentro entre ambos es «realmente necesario».
Pero volvió a mostrar su lado combativo: «la guerra continuará» mientras el gobierno de Ucrania siga «en el poder», remató.