Washington (AFP) – Estados Unidos enviará próximamente un buque hospital a Colombia para colaborar en la atención de las decenas de miles de personas que huyen cada día de la crisis en Venezuela e ingresan a ese país, informó el martes una portavoz del Pentágono.
«El buque hospital USNS Comfort regresará a Sudamérica este otoño (boreal). Estamos trabajando en los detalles en estrecha coordinación con nuestros socios colombianos», dijo a AFP Sarah Higgins, vocera del Departamento de Defensa.
Esta es la sexta vez que Estados Unidos despliega un barco hospitalario en la región desde 2007, señalaron fuentes del Pentágono, enfatizando que la labor del personal médico y de enfermería para atender el impacto de la crisis venezolana se desarrollará en conjunto con los socios regionales. Según el Pentágono, esto es reflejo del «firme compromiso de amistad y solidaridad» del gobierno de Donald Trump con las Américas.
Al finalizar su gira por Sudamérica la semana pasada, el secretario de Defensa, Jim Mattis, anunció su intención de desplegar un barco equipado para atención médica en la región, ante la creciente llegada de refugiados venezolanos a Colombia y otros países vecinos.
«Es una misión absolutamente humanitaria. No estamos enviando soldados; estamos enviando doctores. Y es un esfuerzo para lidiar con el costo humano (del presidente Nicolás) Maduro y su régimen cada vez más aislado», explicó Mattis a reporteros en el vuelo de regreso a Washington, según la transcripción publicada por el Pentágono.
«Específicamente no enviaremos un barco a aguas venezolanas», dijo.
Mattis expresó su preocupación por el «impacto desestabilizador» y el «enorme costo» que supone la masiva llegada de refugiados venezolanos a los países vecinos, un tema que dijo haber discutido con el presidente colombiano, Iván Duque, el viernes, en su última escala tras visitar Brasil, Argentina y Chile.
«Sabemos que el sistema de atención médica de Colombia no puede agregar un millón de personas en una parte del país sin afectar al resto. Es imposible. Así que vamos a ir», dijo.
«Este es un esfuerzo muy específico para tratar de ayudar a nuestros vecinos, que están haciendo todo lo posible para ayudar a estos refugiados».
Más de 2,3 millones de venezolanos han huido de su país, principalmente a Colombia, Ecuador, Perú y Brasil, sobre todo debido a la falta de alimentos y medicinas que coloca en riesgo a decenas de miles de personas, dijo la ONU la semana pasada.
El USNS Comfort integra la flota de la Marina estadounidense como un buque no combatiente y, como tal, no porta armas ofensivas.
El enorme buque de 272 metros de eslora estuvo el año pasado en Puerto Rico, luego del devastador paso del huracán María. También brindó asistencia durante crisis migratorias de Cuba y Haití en la década de los noventa, dio apoyo a una docena de países latinoamericanos y del Caribe en 2007, y colaboró tras el sismo en Haití en 2010, entre otras misiones.