Buenos Aires (AFP) – La camiseta con la que Diego Maradona anotó los memorables goles contra Inglaterra en el Mundial México-86 es única para los amantes del fútbol, dijo Oscar Garré integrante de aquella selección argentina, al enterarse de que será subastada a partir del 20 de abril.
«Es sin ninguna duda la más emblemática que tuvo el fútbol argentino y el fútbol mundial. Sería muy lindo tenerla en Argentina», dijo Garré a la AFP.
La casa de subastas Sothebys anunció este miércoles en Nueva York que ofrecerá en remate la prenda por la que se espera obtener más de cinco millones de dólares.
La camiseta, color azul y con el número 10 en la espalda, la usó Maradona en el partido de cuartos de final cuando Argentina venció 2-1 a Inglaterra con dos goles de su autoría: el famoso hecho ‘con la mano de Dios’ y el llamado ‘gol del siglo’ que encabeza la lista de los mejores de la historia.
«La verdad es que son de esas camisetas que tienen un valor muy especial, no solamente para nosotros sino para todo el pueblo argentino», afirmó el exfutbolista de Ferrocarril Oeste.
Su dueño es el exmediocampista inglés Steve Hodge, que la intercambió con Maradona al final del partido en el que se enfrentaron ambas selecciones cuatro años después de la guerra de Malvinas entre Argentina y Gran Bretaña.
«Sería muy lindo tener esa camiseta acá, sobre todo en AFA» la Asociación del Fútbol Argentino, dijo Garré.
«En esa época nosotros cambiábamos las camisetas con los rivales y en ese partido, que era tan importante sobre todo para la gente porque era con Inglaterra, Diego la cambió» con Hodge, que la atesoró durante los últimos 35 años.
La camiseta tuvo además una historia de tropiezos antes de convertirse en tesoro.
El entonces entrenador Carlos Bilardo, preocupado por el calor de la capital mexicana, mandó a comprar camisetas más ligeras para sus jugadores, un encargo que obligó a recorrer las tiendas deportivas de Ciudad de México a toda prisa.
Argentina debía usar la casaca alternativa en lugar de su tradicional celeste y blanca.
«Esa camiseta se tuvo que salir a comprar sobre la hora porque no quedaban con ese color azul y justo enfrentábamos a Inglaterra que jugaba con blancas», recuerda Garré divertido.
«Había una persona encargada de las compras y tuvo que salir a buscar un juego de camisetas por el Distrito Federal. Consiguió esas, que eran muy especiales porque hubo que ponerles números autoadhesivos y de color gris a falta de blancos», añadió.
El jugador, que dice atesorar en una suerte de altar personal su medalla de campeón del mundo 1986, imagina un altar similar en Argentina para esa camiseta.
«Si bien hay muchachos que han llevado la camiseta de la selección con mucha valentía, honor y respeto, la de Diego es única, la más emblemática que tuvo el fútbol», afirmó.