Quito (AFP) – El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, anunció este viernes que solicitó la renuncia del ministro del Interior, Patricio Carrillo, tras el asesinato de una abogada en una escuela de formación policial.
«El general Patricio Carrillo ha dedicado su vida y su lealtad al ideal de un país seguro. Sin embargo, tras los acontecimientos de los últimos días he decidido que su servicio concluya el día de hoy», dijo Lasso a través de una cadena nacional.
El mandatario, quien calificó de «femicidio» el asesinato de la abogada de 34 años, agregó que le pidió a Carrillo «su dimisión como ministro del Interior».
Más temprano, el gobernante -quien regresó esta noche a Ecuador tras participar en la Asamblea General de la ONU- ordenó la destitución de dos generales de la policía y pidió la renuncia al alto mando policial.
«He solicitado a los mandos policiales poner sus cargos a disposición, presentando sus respectivas bajas. El Gobierno Nacional valorará su permanencia en la institución», escribió Lasso en su cuenta de Twitter.
Según el mandatario, se trata de Freddy Goyes, quien se desempeñaba como director nacional de Investigación de la Policía Judicial, y Giovanni Ponce, jefe de Seguridad Ciudadana y Orden Público.
Los anuncios se dan tras el hallazgo del cadáver de la abogada María Belén Bernal, quien desapareció el 11 de septiembre tras ingresar a la Escuela Superior de Policía (ESP) para visitar a su esposo, el teniente Germán Cáceres, que es considerado sospechoso de asesinato y está prófugo.
El cuerpo fue hallado este miércoles en un cerro cercano a la escuela de oficiales, ubicada en las afueras de Quito.
«Estas decisiones son solo el primer paso en el largo camino que tenemos por delante para transformar nuestra policía nacional y sanar como país», expresó Lasso en la cadena de radio y televisión.
Una semana –
El mandatario además le dio al comandante general de la Policía, Fausto Salinas, un plazo de «una semana para entregar resultados definitivos que conduzcan a la captura de Germán Cáceres».
El asesinato de Bernal volvió a encender las alarmas en el país por los femicidios, que según organizaciones sociales suman al menos 206 en lo que va del año.
De acuerdo con la Fiscalía de Ecuador, se han registrado 573 femicidios desde 2014, cuando se incluyó el femicidio como un delito en el Código Penal ecuatoriano.
Tras conocer el pedido de renuncia a las cabezas de la Policía, Salinas señaló que el lunes los integrantes del mando policial pondrán sus «cargos a disposición».
Este viernes fue enterrada Bernal, de 34 años. Una marcha encabezada por su madre, Elizabeth Otavalo, acompañó el ataúd hasta un cementerio en el norte de la capital ecuatoriana.
Familiares y activistas llevaban fotografías de la abogada y de su esposo, por el que el gobierno ofrece hasta 20.000 dólares de recompensa a quienes entreguen información.
«Quiero pedir perdón porque esto no debe suceder nunca, mucho menos en un edificio público donde se forman quienes deben proteger», señaló Lasso, quien apareció en la alocución acompañado de su esposa, María de Lourdes Alcívar.
La madre de Bernal ha tildado el caso como un «crimen de Estado», por considerar que su hija murió dentro de una institución policial.
De acuerdo con declaraciones de abogados de los implicados, al menos por 20 minutos se escucharon gritos de auxilio desde la habitación de Cáceres en la escuela policial.
Bernal había acudido a la Escuela Superior de Policía la madrugada del 11 de septiembre a una hora inusual, según Salinas. Sin embargo, su ingreso fue autorizado por los oficiales encargados del control.
Por este caso, una cadete que presuntamente tenía una relación con Cáceres permanece detenida y 12 uniformados son investigados.