San Juan (AFP) – Un grupo de desconocidos derribó la estatua del explorador español y primer gobernador de Puerto Rico, Juan Ponce de León, este lunes de madrugada en San Juan, la capital de la isla caribeña, horas antes de que el rey Felipe VI de España visite la ciudad.
«Unos individuos se acercaron» a la estatua, situada en la plaza San José, en el casco histórico de San Juan, y «le ocasionaron daños», según un informe policial, citado por la prensa local.
La base del monumento se rompió y la estatua se desarmó en dos partes por el impacto de la caída, según imágenes difundidas en las redes sociales.
El alcalde de San Juan, Miguel Romero, criticó un «acto vandálico», en declaraciones con el medio El Nuevo Día.
El rey Felipe VI llegará por la tarde a Puerto Rico, una antigua colonia española convertida en un territorio no incorporado de Estados Unidos, con motivo del 500 aniversario de la fundación de San Juan.
La capital puertorriqueña fue fundada en 1521, pero las celebraciones oficiales se aplazaron debido a la pandemia de covid-19.
Pasado el mediodía, un hombre escaló el pedestal y se sentó en el lugar donde se erigía la estatua de Ponce de León, en señal de protesta, según dijo a la AFP.
«A mí los monumentos colonialistas de verdad que me molestan», declaró Rafael Capó, un maestro de historia de 35 años, para justificar su acto.
Protesta sin estatua –
En las últimas semanas, se ha intensificado en Puerto Rico la denuncia contra políticas gubernamentales que ofrecen beneficios contributivos para extranjeros que se muden a la isla y que, según expertos, favorecen el desplazamiento de las comunidades locales.
Capó se refirió a esto para explicar por qué considera que existe una relación entre la denuncia del colonialismo español y de la situación actual en Puerto Rico. «Quinientos años después, la historia se sigue repitiendo… Siguen importando la gente de afuera para sacar a los locales», dijo, poco antes de bajar del pedestal.
La policía, que estaba presente en el lugar, se marchó sin hablar con él.
Las autoridades indicaron que estaban revisando imágenes de cámaras de seguridad para tratar de localizar a los responsables del derribo de la estatua.
Varios medios locales apuntan a que un grupo denominado Fuerzas Libertarias de Borikén asumió la autoría de los hechos.
«Ante la supuesta visita del rey de España, Felipe VI, a Puerto Rico y la escalada de invasores gringos apoderándose de nuestras tierras queremos enviar un mensaje claro: Ni reyes, ni gringos invasores», escribió el grupo en un comunicado.
Ponce de León recibió en 1508 un permiso real para explorar y colonizar la isla, que los taínos, sus habitantes nativos, llamaban Borikén.
La estatua derribada fue forjada en 1882 en Nueva York, con bronce obtenido de cañones ingleses capturados después de un fallido ataque británico contra los españoles en Puerto Rico, en 1797.