París (AFP) – El exguerrillero chileno Ricardo Palma Salamanca, condenado por el asesinato del máximo ideólogo de la dictadura de Pinochet, sabrá este miércoles si la justicia francesa decide extraditarlo a Chile, de donde huyó hace más de dos décadas.
Ricardo Palma Salamanca, exmiembro de la cúpula del izquierdista Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), fue detenido en París en febrero 2018 en virtud de una orden de captura internacional emitida por Chile, antes de ser liberado bajo control judicial.
Este exguerrillero, ahora de 49 años y cabello gris, estaba prófugo desde 1996, cuando se escapó de una cárcel de alta seguridad de Santiago en una espectacular fuga a bordo de un helicóptero, ante la mirada estupefacta de los guardias.
Palma Salamanca purgaba en esa prisión una pena a cadena perpetua por el asesinato el 1 de abril de 1991 del senador Jaime Guzmán, considerado el máximo ideólogo de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
La sala de instrucción de la corte de apelaciones de París anunciará el miércoles por la tarde si es favorable al pedido de extradición de Chile, que fue aprobado por la Corte Suprema del país sudamericano en un fallo unánime en febrero de 2018.
Si el tribunal se opone a su extradición, el Estado chileno no podrá recurrir a esta decisión, dijo a la AFP la fiscalía. En cambio, si el veredicto de la corte es favorable a la extradición, Palma Salamanca tendrá cinco días para presentar un recurso ante el tribunal de Casación.
En la última audiencia en esta misma sala el pasado 12 de abril, el ministerio público francés se pronunció en contra de la extradición de Palma Salamanca, a quien la Oficina Francesa para los Refugiados y los Apátridas (OFPRA) concedió el asilo político.
– ‘Tensión’ –
Para la fiscalía, la jurisprudencia francesa y los convenios internacionales prohíben expulsar a una persona a la que se haya acordado el estatuto de refugiado político, una acepción que según su interpretación incluye la extradición.
Subrayó además que la OFPRA estimó creíbles las alegaciones de Palma Salamanca que asegura que fue «torturado» por las autoridades chilenas para que confesara el asesinato del senador Guzmán y argumentó que informes de organismos internacionales corroboran la existencia de malos tratos en Chile en la década de los 90.
Por su parte, el abogado que defiende los intereses del Estado chileno, Vincent Courcelle Labrousse, pidió que se apruebe la extradición, argumentando que la condena contra Palma Salamanca se dictó cuando Chile ya era una democracia y que por lo tanto el exguerrillero debe regresar al país sudamericano para cumplir su pena.
El caso de Palma Salamanca ha provocado tensión entre los gobiernos de Francia y Chile. El presidente chileno, Sebastián Piñera, dijo que envió una carta a su homólogo francés, Emmanuel Macron, en la que le manifestó su «disconformidad» por dar asilo a Palma Salamanca.
Ambos mandatarios abordaron este caso durante una visita a París de Piñera en octubre pasado.
Además del asesinato de Jaime Guzmán, la justicia chilena reclama a Ricardo Palma Salamanca por el secuestro en 1991 de Cristián Edwards del Río, hijo del dueño del diario El Mercurio, cercano a la dictadura, un hecho por el que también fue condenado.
Al menos 3.200 personas murieron y 38.000 fueron torturadas bajo la dictadura de Augusto Pinochet, que falleció en 2006, sin haber sido juzgado.