Nuevo Laredo (México) (AFP) – El consulado de Estados Unidos en Nuevo Laredo, norte de México, suspendió sus servicios tras la violencia que desató recientemente la captura de un narcotraficante, durante la cual la sede fue impactada con granadas, anunció este jueves su titular.
«El consulado de Nuevo Laredo no ofrecerá servicios consulares de rutina al público hasta nuevo aviso», anunció a la prensa Deanna Kim, cónsul estadounidense en esta ciudad del estado de Tamaulipas, fronteriza con Estados Unidos.
Kim agregó que las oficinas permanecerán abiertas solo para emergencias.
Según la diplomática, durante la madrugada del pasado lunes el consulado «recibió disparos y fue alcanzado por unas granadas aparentemente (lanzadas) por miembros de una organización criminal».
«Por precaución, el Departamento de Estado ha autorizado la salida del personal que no es de emergencia y sus familiares», indicó.
La captura del líder del Cártel del Noreste, Juan Gerardo Treviño, desató el domingo pasado intensas balaceras, bloqueos viales y quema de vehículos que se extendieron hasta la madrugada del lunes.
Treviño, alias el ‘Huevo’, fue deportado a Estados Unidos el lunes, pues tenía la doble nacionalidad mexicana y estadounidense.
El señalado capo deberá enfrentar en Estados Unidos cargos por tráfico de drogas y lavado de dinero; en México tiene acusaciones de homicidio y terrorismo, según la secretaría de la Defensa Nacional.
Es sobrino del detenido Miguel Ángel Treviño (alias ‘Z-40’), considerado el último líder de Los Zetas, una organización surgida del Cártel del Golfo (el más antiguo de México), conformada por militares desertores y que se caracterizó por sus prácticas sanguinarias.
Un hermano del «Huevo», Juan Francisco Treviño, cumple cadena perpetua en Estados Unidos.
México está inmerso en una espiral de violencia que deja unos 340.000 muertos -en su mayoría atribuidos a acciones del crimen organizado- desde 2006 cuando se desplegó una ofensiva militar antidrogas.