Ciudad del Vaticano (AFP) – El célebre escritor y músico brasileño Chico Buarque entregó este martes al papa Francisco un informe sobre el uso de la justicia para fines políticos en América Latina, el «lawfare», considerado una amenaza para la democracia en la región, informaron fuentes de la delegación.
Buarque, que estaba acompañado por otros líderes latinoamericanos, entre ellos la abogada brasileña Carol Proner y el argentino Roberto Carlés, conversó por 45 minutos con el papa Francisco en su residencia privada de la Casa Santa Marta en el Vaticano.
El papa argentino, sumamente sensible a esos temas, recibió el informe sobre el «lawfare», palabra de reciente cuño, para indicar las llamadas «guerras jurídicas» y la persecución de líderes políticos y de movimientos de protesta sociales.
«El llamado lawfare es una técnica de guerra jurídica, que el general norteamericano Charles Dunlap describió como un método de guerra no convencional, a través del cual la ley se utiliza como un medio para alcanzar un objetivo militar», explicaron.
Entre los casos señalados por los denunciantes figuran tres expresidentes: el brasileño Lula da Silva, actualmente encarcelado, el ecuatoriano Rafael Correa, y la argentina Cristina Kirchner.
«Lawfare es el uso indebido de la ley para promover una persecución política», explicaron tras el encuentro.
El grupo de activistas considera que se trata de una verdadera «amenaza» para la democracia en todo el mundo, y teme que a través de las nuevas redes de comunicación se extienda con más facilidad la «demonización» y la deslegitimación» del adversario político.
