Río de Janeiro (AFP) – «Tierra roja, de sangre derramada, por la sangre de guerreros del pasado masacrados»: con palabras punzantes y a ritmo de hip hop, los raperos indígenas de Brô MC’s denuncian la violencia que enfrentan sus aldeas en territorio guaraní del centro-oeste de Brasil.
«Nos dicen que nuestras letras son duras, pero es nuestra realidad la que es dura», explica a la AFP Clemerson Batista, fundador del grupo junto a su hermano Bruno Veron y a otro dúo de hermanos, Kelvin y Charlie Peixoto.
Los Brô MC’s (Brô, jerga para «hermano» en inglés) son reconocidos como la primera banda de rap indígena de Brasil. Con una estética que mezcla pinturas corporales, tocados de plumas, jeans y tenis deportivos, el cuarteto está en escena desde 2009.
«En las aldeas: mercenarios, latifundistas. Muchos murieron defendiendo su tierra», protesta «Terra vermelha», una de las canciones más conocidas del conjunto.
Esos temas fueron escritos en portugués, pero otros son cantados en guaraní, idioma que los cuatro raperos hablan en sus aldeas de Jaguapiru y Bororó, en el estado de Mato Grosso do Sul, un polo de la agroindustria brasileña, fronterizo con Paraguay y Bolivia.
Amenazas de muerte –
Sus comunidades forman parte de la reserva indígena Francisco Horta Barbosa, fundada hace más de un siglo, en 1917. Es una de las más pobladas del país, con cerca de 16.000 habitantes del pueblo guaraní-kaiowá.
«El gobierno ha desplazado a los indígenas de la región y los ha confinado en tierras menos productivas», dice Clemerson (29), quien conversó con la AFP en una gira del grupo por Rio de Janeiro.
«Cuando queremos volver a la ‘Tekoha’, la tierra sagrada de nuestros ancestros, vemos vallas que protegen las plantaciones de soja o de maíz», relata.
Los guaraní-kaiowá filmaron recientemente el avance de un tractor transformado en un tanque para sembrar el pánico en las aldeas.
«Con este ‘caveirao’, pasan sobre las casas para destruirlas, incluso cuando hay habitantes adentro», afirma Bruno (27).
«Hay violencia y tiroteos, es como en las favelas» urbanas, continúa.
El «caveirao», literalmente «gran calavera», es el nombre que reciben los vehículos blindados utilizados por las fuerzas policiales durante, por ejemplo, las redadas en las favelas de Rio.
La tensión en las tierras indígenas se ha incrementado desde la llegada al poder en enero de 2019 del presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro. «Recibimos un correo electrónico amenazándonos, diciendo que nos matarían o nos secuestrarían si seguíamos denunciando estos ataques violentos», cuenta Bruno.
Los Brô MC’s están trabajando en un nuevo álbum que llevará por nombre «Retomada», como se denomina a las ocupaciones indígenas de tierras ancestrales entregadas a los agricultores.
Fusión cultural –
Los cuatro miembros del grupo se conocen desde niños y comenzaron a rapear en la escuela.
«Mi hermano comenzó a componer rap a los ocho años. Descubrimos este ritmo en una emisora de radio en la que tocaban hip hop todos los sábados. Los niños se reunían para escuchar el programa en vez de jugar al fútbol», recuerda Clemerson.
«Al principio, los más ancianos no entendían lo que hacíamos, decían que el rap no era parte de nuestra cultura. Pero cuando escucharon nuestras letras, entendieron nuestro mensaje y empezaron a apoyarnos», completa Bruno.
El proyecto tomó cuerpo cuando los jóvenes participaron en los talleres de hip hop de la Central Única de las Favelas, una ONG cofundada por el famoso rapero carioca MV Bill.
Lanzaron su primer álbum en 2009 y al año siguiente fueron invitados a participar en la ceremonia de investidura de la presidenta Dilma Rousseff, en Brasilia.
En 2018 cantaron en un festival en la ciudad alemana de Frankfurt y el año pasado debían realizar una gira por Europa, cancelada debido a la pandemia de coronavirus.
En mayo, el grupo salió por primera vez de la reserva en un año y medio para grabar en Rio de Janeiro una edición del programa de televisión «Sí a la igualdad racial», una ceremonia que premia las mejores iniciativas sobre ese tema en Brasil.