La Paz (AFP) – Brasil le manifestó a Bolivia su deseo de que le conceda la extradición del narcotraficante boliviano Pedro Montenegro, quien causó una de las mayores crisis en la policía de su país al crear una red de vínculos con uniformados.

«Hemos recibido una comunicación oficial en la que Brasil expresa su interés de continuar con el trámite de extradición de Montenegro», dijo el canciller boliviano, Diego Pary, en una entrevista al diario local El Deber.

Montenegro fue detenido el pasado sábado tras semanas de que la prensa difundiera sus lazos con policías como el exjefe de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen, Gonzalo Medina, quien fue dado de baja por este tema, junto a otros dos más de la institución.

Brasil emitió una orden de captura internacional contra Montenegro por tráfico de drogas en julio de 2015, pero la oficina de Interpol-Bolivia eliminó de sus sistemas el caso, según reveló el mismo Ministerio de Gobierno de La Paz.

El caso Montenegro motivó un terremoto en la institución policial boliviana, al revelarse que el narcotraficante recibió reconocimientos de algunas unidades por su ayuda económica para obras. Además, se dio a conocer que pagaba viajes de turismo a varios uniformados.

El gobierno lanzó la idea de «refundar» la policía, creada en 1826, mientras sus jerarcas iniciaron un proceso de purga interna por varios casos de corrupción para limpiar su imagen.

El jefe de la diplomacia boliviana señaló que remitirá la solicitud de Brasil «a la instancia que corresponde, que es el Tribunal Supremo de Justicia» (TSJ).

El TSJ, que debe aprobar la extradición a Brasil, aún no se pronunció sobre el caso.