Campo Felice (Rocca di Cambio) (Italia) (AFP) – El colombiano Egan Bernal (Ineos), ganador de la novena etapa este domingo y nuevo líder de la general del Giro de Italia, se mostró muy satisfecho por una victoria que significa «mucho» para él al ser la primera en una gran vuelta.
«No levanté los brazos porque no sabía que había ganado. No vi cuándo superé al último corredor» escapado, explicó Bernal, de 24 años.
«Estaba muy concentrado en mi esfuerzo para liberar un máximo de potencia», añadió el ciclista colombiano en referencia al final de etapa en Campo Felice, con una subida final de 6,6 km cuya cima estaba a 1.600 de la meta a través de un camino no asfaltado.
«Ganar aquí significa mucho para mí después de un año difícil física y mentalmente», declaró el colombiano, haciendo referencia a los dolores de espalda que le obligaron a retirarse el año pasado del Tour de Francia cuando se disponía a defender la corona obtenida una temporada antes.
Bernal, líder del equipo Ineos en el Giro, se mostró tranquilizador con respecto a sus problemas físicos: «Mi espalda está bien en estos momentos. Espero que siga así hasta Milán».
«Mi espalda está bien» –
«Es un tema de preocupación, pero hacemos todo lo posible en el equipo para que esté en buena salud. Además del masaje, hago un tratamiento diario de fisio», explicó.
A comienzos de temporada, el colombiano volvió a quejarse de dolores en la zona dorsal, aunque eso no le impidió acabar tercero en la exigente Strade Bianche, en los caminos empedrados de la Toscana.
«He hecho muchos sacrificios para esto y por eso he liberado muchas emociones. El camino ha sido largo, pero vuelvo a ganar», reivindicó Bernal, cuya última victoria fue en la Ruta de Occitania, hace nueve meses, en lo que fue el preludio de su doble abandono en la Dauphiné y el Tour.
Curiosamente, Bernal obtuvo este domingo su primera victoria parcial en una gran vuelta, ya que ganó el Tour de 2019 sin ganar una sola etapa.
«Soy un poco italiano» –
«En esta etapa, lo primero era no perder tiempo. Lo quería hacer bien, pero no sabía si podría ir a buscar la victoria. Ha sido en el transcurso de la carrera, en la última subida, cuando he decidido tirar a fondo. Mis compañeros estaban más confiados que yo», admitió.
El ataque a falta de unos 500 metros para la meta le permitió no solo ganar la etapa, sino vestirse de rosa por primera vez en su carrera, siendo el quinto colombiano en conseguirlo (tras Rigoberto Urán, Nairo Quintana, Esteban Chaves y Fernando Gaviria).
«Llevarlo un solo día ya es motivo de una gran emoción y un honor. Soy un poco italiano, llevó a este país en el corazón. He vivido aquí durante dos años y tengo muchos amigos que son como mi familia, a los que vengo a menudo a visitar», explicó.