Madrid (España).- La educación superior en Iberoamérica ha experimentado un notable crecimiento en la última década, alcanzando los 33.5 millones de estudiantes matriculados en carreras de grado y posgrados en 2021, lo que representa un incremento del 30% desde 2012. 

Este aumento se destaca aún más al considerar los desafíos impuestos por la pandemia del COVID-19, que provocó el cierre de aulas y un incremento en la deserción escolar a lo largo de la región.

El más reciente informe del Observatorio Iberoamericano de la Ciencia, la Tecnología y la Sociedad (OCTS) de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), basado en datos de la Red Iberoamericana de Indicadores de Educación Superior (INDICES), ofrece una visión detallada de estas cifras y su evolución. 

En particular, la región de América Latina exhibió un aumento aún mayor, con un 32% más de estudiantes que en 2012.

Pese a los obstáculos de 2020, incluidos los cierres físicos de los institutos, el sistema de educación superior demostró una notable capacidad de adaptación. 

En 2021, cerca de 5 millones de iberoamericanos se graduaron de algún título universitario, evidenciando un crecimiento en graduados del 37,1% en comparación con 2012, lo cual supera el aumento en la matrícula. 

Este dato refleja no solo una recuperación pospandemia sino también una adaptación exitosa a modalidades de enseñanza digital, que han permitido continuar con los programas académicos.

Sin embargo, existen variaciones significativas dentro de la región en cuanto a la naturaleza de las instituciones educativas. Aproximadamente el 43% de los graduados en Iberoamérica lo hacen en instituciones públicas, cifra que desciende al 39% en América Latina. 

Países como Cuba, Uruguay, Portugal, Argentina, Bolivia, Panamá y España presentan una mayor proporción de estudiantes en universidades públicas, destacando diferencias en políticas educativas y accesibilidad.

El análisis del informe también destaca que la mayoría de los estudiantes se concentra en niveles de pregrado y grado (licenciatura), con más de 27,6 millones de matriculados en 2021, reflejando un aumento del 32% desde 2012. 

Los estudios de maestría y doctorado presentan dinámicas diferentes; mientras la maestría aumentó un 17% en la última década, los doctorados vieron el mayor crecimiento porcentual, con un 77%, aunque en números absolutos sigue siendo el nivel menos frecuentado, con solo 388 mil estudiantes.

La participación femenina en la educación superior es otro punto destacado del informe. En 2021, las mujeres representaron más de la mitad de los graduados en todos los niveles académicos: 58% en maestrías y especializaciones, 57% en licenciaturas y 52% en doctorados.

 Este incremento del 38% en graduadas desde 2012 subraya un avance significativo hacia la equidad de género en el ámbito académico iberoamericano.

Mientras Iberoamérica enfrenta el desafío de mantener la calidad educativa y la accesibilidad en un contexto postpandemia, los datos reflejan una tendencia positiva de crecimiento y adaptación que augura un futuro prometedor para la educación superior en la región.