México (AFP) – El presidente de México, el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, dijo este miércoles que la imposición por Estados Unidos de aranceles al tomate mexicano alienta la migración de indocumentados.
«Eso es alentar, eso es lo opuesto a una política inteligente para atemperar el fenómeno migratorio», advirtió López Obrador en su conferencia de prensa matutina.
Atribuyó la decisión, que también calificó como «inmoral», a las elecciones de Estados Unidos, que se llevarán a cabo en noviembre 2020 y a las presiones que ejercen productores de tomate de ese país.
«Cerrar fronteras para los productores es una contradicción», insistió.
El gobierno de López Obrador dice que México, además de ser expulsor de población, enfrenta una ola «insólita» de indocumentados provenientes de Centroamérica, el Caribe y África desde octubre pasado, cuando una caravana compuesta por unos 7.000 centroamericanos atravesó el país para llegar a la frontera con Estados Unidos.
La presión migratoria derivó el martes en una cuarta fuga masiva de indocumentados que se encontraban detenidos en una estación del Instituto Nacional de Migración del estado de Chiapas, fronterizo con Guatemala.
Washington impuso la carga tributaria al tomate mexicano luego que ambos países no lograran renovar un acuerdo que suspendía una investigación antidumping a las exportaciones de México.
Al mismo tiempo que se inició la aplicación de los nuevos aranceles al tomate, se reactivó la investigación antidumping, suspendida desde 1996.
En el caso de que los dos países alcancen un nuevo acuerdo para la exportación del fruto o la investigación estadounidense encuentre que no hubo daño, el arancel a los productores mexicanos será reembolsado, aclaró el martes el Departamento de Comercio de Estados Unidos.
En 2018 las exportaciones de ese producto, que producen empleos de forma directa e indirecta a 1,4 millones de personas, ascendieron a cerca de 2.000 millones de dólares.
