Lusaka (Zambia).- En muchos lugares del mundo se infrautiliza la mecanización agrícola como un medio de producción de alimentos.
Si se emplea de un modo sostenible, la mecanización permite incrementar la productividad, mejorar las condiciones de trabajo y los ingresos, generar nuevas oportunidades empresariales, lograr una gestión más cuidadosa de los cultivos y la ganadería, y reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos.
Pero muchos obstáculos dificultan que los pequeños agricultores adopten la mecanización, en particular en el África subsahariana.
Zambia es un ejemplo de ello.
La agricultura es la fuente principal de ingresos de la mayoría de los aproximadamente 20 millones de personas que viven en este país sin salida al mar, en el que los pequeños agricultores son los principales productores de cultivos de alimentos básicos como el maíz, el mijo y la yuca.
Sin embargo, si bien es un país rico en recursos naturales, menos de un tercio de su superficie se utiliza para la agricultura y la baja productividad es un problema muy importante.
Por tanto, en Zambia la mecanización puede significar un cambio de las reglas del juego.
Conectar a los compradores con los proveedores
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) presenta un estudio de caso de caso en su informe El estado mundial de la agricultura y la alimentación 2022, en el que se muestra que los hogares de pequeños agricultores de Zambia equipados con tractores duplicaron sus ingresos al cultivar una superficie mucho mayor de sus tierras.
Además, a pesar de haber reducido a la mitad la cantidad de trabajo necesario por hectárea, el aumento de la producción hizo necesario un incremento de la mano de obra contratada para todas las tareas no mecanizadas.
Esto contradice la idea de que la mecanización elimina empleos. Por último, el desplazamiento de la mano de obra familiar a la mano de obra asalariada redujo la carga de las mujeres y los niños, lo que dio a estos últimos más oportunidades de asistir a la escuela.
No obstante, muchos pequeños agricultores zambianos desconocen los beneficios de la mecanización. E, incluso cuando los conocen, las restricciones financieras pueden impedirles comprar el equipo necesario o acceder a servicios de mecanización asequibles.
Aquí es donde interviene el proyecto Intensificación Sostenible de los Sistemas de Pequeños Agricultores en Zambia.
Financiado por la Unión Europea y ejecutado por la FAO, en colaboración con el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo, y el Ministerio de Agricultura de Zambia, el proyecto Intensificación Sostenible de los Sistemas de Pequeños Agricultores ha establecido asociaciones con proveedores del sector privado con objeto de fomentar los conocimientos en materia de mecanización y establecer vínculos con agricultores mediante la organización de una serie de giras y demostraciones en todo el país.
Las demostraciones sobre el terreno de maquinaria y equipos mostraron lo eficaz que puede ser una mecanización agrícola adecuada para las explotaciones. Y lo que es más importante, los visitantes también recibieron opciones de financiación asequible a fin de poder acceder más fácilmente a estos equipos.
Este proyecto funciona como un intermediario entre compradores y proveedores, de manera que “cuando se cierra un trato, ese trato es justo”, dijo Geoffrey Siulemba, Coordinador Nacional del proyecto Intensificación Sostenible de los Sistemas de Pequeños Agricultores, a los agricultores en una de estas giras.
“Antes, usábamos las manos para plantar y azadas manuales para cultivar la tierra y escardar. Estas son actividades muy cansadoras, ya que sufríamos en este tipo de trabajo”, dijo Lilian Shambuluma, una agricultora del distrito de Luwingu, del norte de Zambia. “Ahora que me he iniciado en la mecanización, creo que cultivaré al menos cuatro hectáreas de frijoles.”
La abrumadora participación de los agricultores que asistieron a las giras confirmó que existe un gran interés en la mecanización.
El Gobierno de Zambia también se hizo eco de la iniciativa.
“Queremos cruzar el umbral de pobreza y no lo cruzaremos con azadas y fuerza humana. Necesitamos fuerza animal. Necesitamos la fuerza de las máquinas”, dijo a los agricultores el Ministro de Agricultura zambiano, Reuben Mtolo, en la presentación nacional de las giras sobre mecanización.
El proyecto también ha ayudado al gobierno zambiano a formular una estrategia nacional de mecanización agrícola. La estrategia aborda los retos comunes de la mecanización agrícola ayudando a alcanzar los objetivos nacionales en materia de seguridad alimentaria.
Iniciado en 2019, el proyecto Intensificación Sostenible de los Sistemas de Pequeños Agricultores está en práctica en cinco provincias de Zambia que representan las tres principales regiones agroecológicas del país.
Hasta la fecha, el proyecto ha llegado a más de 17 000 pequeños agricultores con los que se ha colaborado.
Se propone alcanzar a otros 44 000 durante los próximos tres años, ampliando la escala de la producción sostenible de alimentos y creando resiliencia en los sistemas alimentarios, centrándose, además, en la adaptación al cambio climático y las medidas de mitigación.