Porterville (California).- Tras años de esfuerzos coordinados, una familia de siete castores fue liberada en la cuenca del río Tule de South Fork, dentro de la reservación indígena del río Tule.
Este evento marca un hito en el programa de reintroducción de castores llevado a cabo por la tribu del río Tule en colaboración con el Departamento de Pesca y Vida Silvestre de California (CDFW). La liberación de estos ingenieros naturales busca revitalizar la ecología de la zona, esencial para la conservación del agua y la protección contra sequías e incendios forestales.
Los castores son conocidos por su habilidad para modificar sus entornos, construyendo represas que retienen el agua en el paisaje. Esto resulta en la expansión de los caudales estacionales y el aumento de los caudales base de verano, lo que mejora significativamente la resiliencia a las condiciones climáticas adversas y conserva el suministro de agua potable de la tribu, que depende en un 80% de la cuenca del río Tule.
Además de los beneficios hidrológicos, los biólogos de vida silvestre anticipan mejoras en las condiciones del hábitat para diversas especies en peligro, incluyendo anfibios y aves ribereñas como las ranas de patas amarillas y las papamoscas sauce del suroeste.
«Hemos enfrentado numerosas sequías a lo largo de los años, lo que nos llevó a buscar soluciones para conservar y gestionar nuestro recurso más preciado: el agua», explica Kenneth McDarment, miembro de la tribu del río Tule y exconsejal tribal.
La conexión cultural con los castores es profunda y está documentada en pictografías que datan de 500 a 1.000 años, observables en Painted Rock a lo largo del río South Fork Tule.
Estas imágenes son un testimonio de la presencia histórica de los castores en la región, aunque habían desaparecido de la reserva por décadas.
La reintroducción comenzó hace diez años cuando los líderes tribales, apoyados por investigaciones y abogacía, convencieron al estado de la necesidad de reintroducir a los castores en la cuenca del río Tule.
En 2022, el CDFW lanzó su Programa de Restauración de Castores, financiado por el estado, que también colabora con tribus, ONGs, propietarios privados de tierras y otras agencias para implementar proyectos de restauración basados en la naturaleza.
«La visión de nuestro futuro es diferente a nuestro pasado, donde estos animales fueron vistos como plagas. Ahora, reconocemos su rol crucial en la restauración ecológica», comenta Charlton H. Bonham, director de CDFW.
La ceremonia de liberación contó con una bendición del líder espiritual de la tribu, JR Manuel, y la participación de miembros destacados de comunidades indígenas vecinas.
«Ver a los castores volver a casa y contribuir nuevamente al ecosistema es una visión alentadora», añade McDarment, reflejando un sentimiento de esperanza y renovación ecológica.
Los biólogos permanecerán en el sitio para monitorear el ajuste de los castores a su nuevo hogar en Eagle Creek, asegurando su bienestar y la efectividad de esta reintroducción.
Con el apoyo continuo de diversas organizaciones, la tribu del río Tule está sentando las bases para una recuperación ecológica que trasciende generaciones.