Pasadena (California).- La muerte de una persona deja una huella profunda en sus familiares, especialmente si ocurre en forma repentina.
Sin embargo, hay quienes encuentran consuelo en la donación de órganos y tejidos de ese familiar fallecido, con la esperanza de mejorar la calidad de vida de esos recipientes.
La organización Done Vida (Donate Life) ha llevado a cabo esta labor en Estados Unidos valiéndose de muchos medios. Uno de estos es una carroza en el Desfile de las Rosas que se celebra anualmente en Pasadena.
La primera participación de Done Vida fue en el Año Nuevo de 2004, con la carroza denominada “Sinfonía de Vida”.
La participación de Done Vida en el Desfile de las Rosas comenzó con la visión de Gary Foxen, un recipiente de pulmón, quien buscaba una forma de agradecer el regalo de vida que había recibido.
Foxen sufría de un enfisema grave y recibió un trasplante de pulmón en 1999. Dos años después, escribió una carta a la asociación Done Vida para sugerir la participación en el Desfile de las Rosas con una carroza.
“He estado tratando de encontrar una manera de pagarle a la sociedad este maravilloso regalo [de la vida]”, escribió Gary Foxen, el 17 de abril de 2001. “Creo que tengo una buena idea sobre cómo hacerlo”.
La idea fue aceptada y, desde 2004, la presencia de la carroza de Done Vida en el Desfile de las Rosas se ha convertido en una tradición nacional para toda la comunidad de donantes y trasplantes.
Donación de órganos y tejidos
La donación de órganos puede realizarse cuando fallece la persona, ya sea que haya estado registrada o sus familiares decidan hacerlo.
Pero también, una persona puede donar un órgano como el riñón o parte de su hígado, páncreas, pulmón o intestino y continuar su vida normal.
La donación de órganos cuando fallece una persona puede salvar o mejorar la vida de 8 personas donando su corazón, pulmones, riñones, hígado, páncreas e intestino delgado.
Un donante de tejido puede mejorar la vida de hasta 75 personas al donar sus córneas, piel, huesos y válvulas cardíacas, entre otros.
Según cifras de Done Vida, 33.281 personas recibieron donaciones de órganos de personas fallecidas mientras que 5.960 recibieron trasplantes de donantes vivos en 2022.
Actualmente, hay 105.199 personas en la lista de espera de órganos. La cantidad más alta es la de riñones, con 89.597.
“Apoyándonos unos a otros”
El tema de la carroza de Done Vida es “Apoyándonos unos a otros”, el cual busca reflejar la importancia de la donación de órganos, ojos y tejidos.
La pieza principal de la carroza es un dragón callejero, que simboliza poder, buena suerte, fuerza, prosperidad y abundancia en la cultura china.
La carroza se elabora con semillas secas de cebolla, ajonjolí, lino, perejil, arándanos, además de lentejas rojas y anaranjadas. Las flores que adornan la carroza incluyen rosas, claveles y flores secas como las llamadas siempre vivas (Straw Flowers) amarillas y anaranjadas.
El dragón lanzará humo de su nariz.
“Hemos tratado de copiar los colores de un dragón callejero original de china, para que sean los mismos”, dijo Mimi Thompson, quien ha estado colaborando en la elaboración de carrozas de Done Vida por 16 años.
En la carroza viajarán 16 personas que han recibido órganos y tejidos, junto con los retratos florales de 39 personas que dieron el regalo de vida a otros con la donación de órganos, córnea y tejidos.
Junto a ellos, cuatro donantes vivos caminarán a los lados lados de la carroza, como muestra de que se puede dar un riñón o parte de algún órgano y continuar con una vida normal
“Nos inspiró a todos en la familia”
Los 39 retratos florales, elaborados con flores y semillas molidas de café, canela y otras especias, estarán colocadas en el dragón. Estos retratos representan a aquellos que han dado el regalo de la vida.
Uno de estos retratos florales es del de Anthony Javier Galván, quien murió en forma repentina en 2019, a los 23 años. Sin embargo, solo fue en ese momento que su familia se enteró que se había inscrito como donante de órganos.
“Es algo de lo que estoy muy orgullosa de él, de registrarse y de pensar que algún día iba a tener la oportunidad de ayudar y salvar vidas. Y lo hizo”, dijo Maribel Galván, madre de Anthony.
El regalo de vida de Anthony Galván fue de tejidos, lo que le permitió una mejor calidad de vida a 27 personas. Y sirvió de motivación a su familia.
“Mi hijo nos inspiró a todos en la familia”, dijo Galvan, resaltando que un gran número de familiares se han registrado como donantes.
“Sabíamos de la donación de órganos pero era algo que no hablábamos en la familia. No teníamos mucha información”, destaca Galván.
Galván ha sido voluntaria en la decoración de la carroza de Done Vida desde el 2021.
“Es un orgullo y un honor muy grande tener a mi hijo en la carroza”, dice Galván. “Espero que, cuando oigan su historia se inspiren, piensen que tienen la oportunidad de darle la vida a otras personas”.
También ha participado en eventos de información a la comunidad sobre la donación de órganos.
“Sé que es difícil tomar esa decisión pero es algo bonito”, dijo Galvan. “Pregunten cómo es la donación para que puedan ellos decidir si gustan registrarse”.
A aquellas personas que no quieran registrarse, Galván aconseja que hablen con sus familiares sobre si desearían que donaran sus órganos cuando fallezcan.
“Eso daría la oportunidad de salvar vidas o ayudar a otras personas”, dijo Galván. “Es algo muy bonito”.
“Un jardín en la carroza”
La carroza también lleva seis “jardines” con un total de 1.200 rosas.
Estas rosas están dedicadas a las personas que han fallecido y han donado sus órganos, a quienes han recibido un trasplante y a los trabajadores de la salud que hacen posible estas donaciones.
Julia Sandoval, de Temécula (Riverside) dedicó una a su hermano menor, John Torres, fallecido el 29 de diciembre de 2013. Torres, fue donante de córnea.
Sandoval destaca que han estado dedicando una rosa para su hermano desde entonces.
“Es un honor. Es un placer. Siempre esperamos con ansias esta forma especial de rendirle homenaje”, dijo Sandoval.
Toda la familia está registrada para ser donante, como el menor de todos lo estuvo antes de morir.
“Estamos registrados para darle a otros la oportunidad de vivir”, dijo Sandoval.