Nueva York (AFP) – Un juez federal de Nueva York aplazó al martes 30 de marzo la sentencia de Juan Antonio «Tony» Hernández, hermano del presidente de Honduras, que hace un año y medio fue hallado culpable de ayudar a traficar 185 toneladas de drogas a Estados Unidos.
La sentencia estaba prevista para el martes 23, pero el juez federal de Manhattan Kevin Castel estará quizás ocupado en esa fecha con el proceso del presunto narcotraficante hondureño Geovanny Fuentes, que también implica al presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, en el tráfico de drogas a Estados Unidos.
Los fiscales del distrito sur de Nueva York pidieron al juez que aplique a Tony Hernández una pena de cadena perpetua.
«El acusado era un congresista hondureño que, junto a su hermano Juan Orlando Hernández, desempeñó un papel de liderazgo en una conspiración de narcotráfico violenta y auspiciada por el Estado», escribieron el martes los fiscales a Castel.
Pidieron que se decomise al acusado 138,5 millones de dólares y se le imponga una multa de 10 millones de dólares.
Los fiscales aseguran que el presidente Hernández fue un «co-conspirador» clave de su hermano Tony, y que lo que diferencia a éste de otros narcos es «la profundidad de su corrupción y su uso de las instituciones hondureñas para facilitar sus crímenes».
Tras un juicio de dos semanas celebrado en Nueva York en octubre de 2019, Tony Hernández, de 42 años, fue hallado culpable de los cuatro cargos de los que era acusado, incluidos tráfico de cocaína a Estados Unidos, falso testimonio y posesión de armas de fuego.
Los fiscales aseguran que el presidente Hernández también fue «co-conspirador» de Geovanny Fuentes. Los alegatos finales de ambas partes en su juicio comenzarán este viernes y los jurados empezarían a deliberar su veredicto ese mismo día.
El presidente hondureño niega haber sido socio de su hermano o de Fuentes en el tráfico de cocaína a Estados Unidos y dice que los narcos que colaboraron con la justicia estadounidense en ambos procesos quieren vengarse de él.
Fabio Lobo, hijo del expresidente de Honduras Porfirio «Pepe» Lobo (2010-2014) -del Partido Nacional, el mismo que los Hernández- fue condenado a 24 años de cárcel en Nueva York en 2017 por ayudar a traficar 1,4 toneladas de cocaína a Estados Unidos.