Caracas (AFP) – Los restos de José Gregorio Hernández, un médico venerado en Venezuela como «santo», fueron exhumados este lunes por la iglesia católica en Caracas en una ceremonia a puerta cerrada por el covid-19; paso previo a su beatificación.
La devoción por el «médico de los pobres» une a millones de creyentes venezolanos. Nacido en la pequeña población de Isnotú (estado Trujillo, oeste) el 26 de octubre de 1864, Hernández, según la tradición, atendió gratuitamente a centenares de pacientes durante la epidemia de gripe española a principios del siglo XX.
Cuando se cumplen 156 años de su nacimiento, la exhumación se trata de «un requisito previo a la ceremonia de beatificación» para «verificar la condición de los restos», «garantizar» su «conservación» y «recoger las reliquias» que serán destinadas a distintos templos en Venezuela y al Vaticano, explicó en una nota de prensa la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV).
«Siento mucha emoción y veneración. Mi mamá era devota (…), cuando se sentía mal, se apretaba contra el pecho una estampita de José Gregorio», contó a la AFP Bereniz Hernández, de 68 años, quien junto a su hija Griselda sintonizó por televisión el acto llevado a cabo en la iglesia Nuestra Señora de La Candelaria, en el centro de Caracas.
La CEV llamó a los feligreses a seguir la ceremonia por televisión o redes sociales a causa de la pandemia del nuevo coronavirus.
«Como están las cosas con la pandemia hay que cuidarse mucho», afirmó Griselda, que ha visitado con su madre el pueblo natal de Hernández. «Estamos súper contentas».
Pese al llamado de la Conferencia Episcopal, feligreses con tapabocas se acercaron a los alrededores del templo, que mantiene sus puertas cerradas por las restricciones frente al covid-19. La pandemia dejaba hasta el domingo 89.565 contagios y 773 muertes en Venezuela según cifras oficiales, cuestionadas por la oposición y por organizaciones como Human Rights Watch por considerar que esconden una situación mucho peor.
Los restos de José Gregorio Hernández habían sido trasladados a la iglesia de La Candelaria el 23 de octubre de 1975 desde el Cementerio General del Sur, uno de los mayores camposantos de Caracas.
La beatificación del «médico de los pobres» fue aprobada el pasado 19 de junio, luego que una comisión teológica integrada por siete expertos concluyera -el 27 de abril- que un milagro de Hernández salvó la vida de la niña Yaxury Solórzano, gravemente herida durante un asalto a sus padres, en marzo de 2017, cuando tenía 10 años.
Yaxury, protegida con barbijo y protector facial, estuvo presente en la exhumación.
El médico, fallecido el 29 de junio de 1919 en Caracas tras ser atropellado por un auto a los 54 años, fundó la cátedra de bacteriología en la Universidad Central de Venezuela y fue uno de los primeros en introducir el microscopio en el país.