Buenos Aires (AFP) – Un juicio por presunta corrupción en la concesión de obra pública, con la exmandataria y actual vicepresidenta Cristina Kirchner entre los acusados, se reanudará el 3 de agosto luego de estar suspendido 140 días por la pandemia del coronavirus.
La decisión fue tomada por el Tribunal Oral Federal 2 luego del «resultado satisfactorio» de una prueba técnica realizada el jueves, según la resolución firmada este viernes.
Las audiencias se realizarán todos los lunes y martes en forma remota. El abogado de la expresidenta (2007-2015), Carlos Beraldi, solicitó que las sesiones sean transmitidas en directo para garantizar su publicidad.
El juicio arrancó en mayo del año pasado, en plena campaña hacia las elecciones que consagraron a Kirchner como vicepresidenta en una fórmula peronista de centro-izquierda encabezada por Alberto Fernández.
Esta es la primera de nueve causas que involucran a Kirchner que llegó a juicio oral.
La vicepresidenta, de 67 años, sostiene que las causas en su contra estuvieron motivadas por una persecución político-judicial durante el gobierno de Mauricio Macri (2015-2019) y a una enemistad personal del exjuez Claudio Bonadio, quien llevó la mayoría de los casos hasta que falleció de cáncer en febrero pasado.
En este juicio, Kirchner está acusada de favorecer al empresario Lázaro Báez en la adjudicación de 51 obras viales en la provincia patagónica de Santa Cruz (sur), bastión histórico del matrimonio Kirchner. Se debate además sobre presuntos sobreprecios e incumplimientos de contrato en esas concesiones.
Báez cumple prisión preventiva y está en la cárcel desde abril 2016. En este caso, se le acordó detención domiciliaria pero sigue en prisión porque otro tribunal que lo juzga por lavado de dinero le puso una caución millonaria para excarcelarlo que hasta ahora el empresario no pudo pagar.
Entre otros, están acusados también el exministro de Planificación Julio de Vido y el exsecretario de Obras Públicas José López, quienes ocuparon sus cargos durante los 12 años de gobierno de Néstor y Cristina Kirchner entre 2003 y 2015.
El juicio, que se encuentra en etapa de declaración de testigos, estuvo suspendido por la feria judicial decretada por la Corte Suprema en coincidencia con el aislamiento social obligatorio por el coronavirus vigente en Argentina desde el 20 de marzo.
El Alto Tribunal levantó la feria esta semana, tras una flexibilización de la cuarentena en la zona metropolitana de Buenos Aires, que concentra 90% de los contagios.