Ciudad de Guatemala (AFP) – Las caravanas de migrantes a Estados Unidos que han estremecido el norte de Centroamérica y México pusieron en evidencia el frágil sistema de asistencia humanitaria para éxodos masivos en la región, señaló Jordi Raich, funcionario del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Miles de centroamericanos partieron en columna a finales de 2018 y principios de 2019, huyendo de la violencia y la pobreza en Honduras, El Salvador y Guatemala. Pero la posibilidad de que nuevas salidas similares que generen emergencias humanitarias a su paso se mantiene latente.
«Las caravanas, si algo han puesto de manifiesto, es la fragilidad del sistema (de atención) porque se puede más o menos manejar una llegada puntual, pero no una llegada masiva», señaló Raich en entrevista con la AFP.
Raich consideró que las caravanas migratorias evolucionaron en «una forma más estructurada» y organizada de la migración tradicional donde las personas parten en grupo familiar o individualmente, a veces orientados por un «coyote».
Reconoció que la respuesta a estos flujos migratorios masivos implica un reto, ante la complejidad del fenómeno de las caravanas.
«Es complicado, porque uno no sabe nunca cuándo se va organizar (una caravana), cuándo va llegar, a dónde va llegar y qué ruta va tomar», precisó el funcionario español.
– Autoprotección –
Raich indicó que las caravanas provocaron que muchos albergues destinados rebasaran su capacidad y alertó de la acumulación de migrantes en las principales fronteras entre México y Estados Unidos, así como en algunas ciudades en su ruta.
Para minimizar el «impacto humanitario», tanto en la migración regular como en eventuales caravanas, en la última semana el CICR puso en marcha un sistema de información por medio de mensajes por WhatsApp sobre consejos para sortear los peligros de la migración ilegal.
«Son mensajes para evitar que la gente muera o desaparezca en el camino», indicó, al señalar que un estudio previo les demostró que la principal fuente de información de los migrantes es WhatsApp.
En los mensajes se incluyen recomendaciones de seguridad, localización de centros de atención, hospitales y albergues, entre otras informaciones.
Los migrantes se suscriben a un número de la aplicación para recibir los mensajes en fotografías, textos, audios y vídeos y la intención es que los reenvíen, agregó Raich.
Entre las advertencias del sistema de mensajería se incluyen recomendaciones para abordar el sistema de trenes en México conocido como La Bestia, escenario de abusos a los migrantes, además de accidentes que han dejado lesionados y muertos.
– Llamado –
Para reaccionar ante una nueva caravana, el CICR mantiene un monitoreo en Guatemala, El Salvador y Honduras, de donde salen la mayor parte de los migrantes.
La semana pasada, la vicecanciller hondureña Nelly Jeréz negó que en su país se estuviera organizando una salida de unos 20.000 migrantes, como lo anunció la secretaria mexicana de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
Las caravanas migratorias han provocado el enojo del presidente estadounidense, Donald Trump, quien pidió suspender la ayuda a los países del norte centroamericano por «no hacer nada» para frenarlas.
«Lo que yo creo que todos tenemos que hacer, tanto organizaciones humanitarias, sociedad civil y autoridades gubernamentales, es tener en cuenta que esa forma de migración existe (caravanas), que se va dar, que va continuar y que tenemos que estar preparados en la medida de las posibilidades para responder», puntualizó Raich.