Buenos Aires (AFP) – Una multitudinaria manifestación colmó el domingo avenidas del centro de Buenos Aires y la Plaza de Mayo, frente a la casa de gobierno, a los 43 años del golpe que instaló una dictadura responsable de decenas de miles de desapariciones, exilios y ejecuciones en centros clandestinos.
«Con memoria y unidad luchemos por la patria que soñaron los y las 30.000 desaparecidos y desaparecidas», fue el lema de la convocatoria de la Mesa de Derechos Humanos, lanzada este año con perspectiva de género y un perfil opositor al presidente Mauricio Macri, a cuyo gobierno responsabilizan de la crisis económica que sufre el país.
«Estamos aquí para reivindicar la lucha de esos 30.000 compañeros y compañeras que ya no están», dijo a la AFP Pablo Rueda, un artista de 29 años.
Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, entre otras organizaciones, desplegaron la tradicional bandera de más de 500 metros con las fotografías de las víctimas del régimen cívico-militar (1976-1983). Desde 1983 entonces todos los gobiernos fueron elegidos en las urnas.
«No hay forma de vencer la hipocresía de los gobiernos que le dan la espalda al pueblo, no hay forma de llegar a construir la patria de justicia social y vida digna por la que lucharon nuestros hijos e hijas sin estar unidos», dijo en rueda de prensa Nora Cortiñas, líder de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, que luego fue a alinearse -como siempre- al frente de la enorme bandera.
«Esta movilización es para que eso que ocurrió no suceda nunca más», comentó a la AFP Diana Lombardo, una médica de 65 años.
Delante de la muchedumbre se colocaron las activistas conocidas por sus pañuelos blancos. Las Abuelas de Plaza de Mayo han recuperado a 128 de los 400 nietos, hijos de prisioneros políticos, desaparecidos en la dictadura.
«Sólo la verdad sana las heridas. Que las nuevas generaciones puedan crecer y vivir en libertad», dijo en su discurso desde el palco Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas.
– Tambores de democracia –
Los tambores de las murgas atronaron la tradicional Avenida de Mayo que desemboca en la histórica plaza. Concentraciones similares se realizaron en plazas de las 23 provincias. Pocas cosas unen a los argentinos como el rechazo al régimen dictatorial.
«El gobierno de Macri viola en forma sistemática los derechos humanos, cierra escuelas, desmantela hospitales, aumenta las tarifas y somete a la población a una zozobra y angustia, con olas de despidos e inflación en ascenso», dijo en rueda de prensa el diputado opositor y cineasta Fernando «Pino» Solanas, quien en la dictadura recibió refugio en Francia.
El presidente, por su parte, recordó el pedido a Estados Unidos para que desclasifique información vinculada a la última dictadura.
«Estos documentos serán fundamentales para que la Justicia pueda avanzar en causas del pasado, aún pendientes, de una de las épocas más oscuras de la Historia Argentina», escribió en una red social.
Más de 900 exmilitares y expolicías han recibido severas condenas por crímenes de lesa humanidad. El exdictador Jorge Videla murió en un calabozo común en 2013, sentenciado a cárcel perpetua.
Los convocantes del 24M reclamaron en un documento final la formación de una alianza que enfrente la aspiración de Macri para salir reelegido de Macri en los comicios del 27 de octubre. Al presidente lo apoya una coalición de radicales socialdemócratas y derechistas.
Al frente de las últimas encuestas de intención de voto figura la expresidenta peronista de centroizquierda Cristina Kirchner, pero aún nada ha dicho sobre si presentará su candidatura, en un marco de atomización de las fuerzas opositoras.