Buenos Aires (AFP) – Miles de personas se manifestaron el jueves en Buenos Aires en rechazo del reciente decreto firmado por el presidente Mauricio Macri que extiende el poder de las Fuerzas Armadas al plano civil, en especial para vigilancia fronteriza.
Macri asignó tareas de seguridad interior a las fuerzas castrenses, algo que les estaba vedado en un país sensible al rol militar desde la represión en la última dictadura (1976-1983).
Al anunciar la firma del decreto, el mandatario reafirmó que la misión principal de las Fuerzas Armadas es «proteger la soberanía nacional y la integridad del territorio».
Sin embargo, muchos ciudadanos entienden que el anuncio esconde la intención de militarizar las calles ante la creciente conflictividad social. Por eso miles de ciudadanos se movilizaron, primero hacia la céntrica Plaza de Mayo y luego hacia el edificio Libertador, donde funcionan las oficinas del estado mayor conjunto.
«Estamos muy dolidos con lo que ya vivimos en la dictadura y por suerte hay muchos jóvenes que están tomando conciencia que eso pasó, no es una película y nunca más en nuestro país vamos a tener a las Fuerzas Armadas en contra del pueblo», afirmó Virginia Fons, una arquitecta jubilada de 67 años.
«Con este decreto subyace el riesgo de que las Fuerzas Armadas, por orden del propio Poder Ejecutivo, se excedan en las funciones que la letra les atribuye», opinó Gustavo Pérez, un profesor universitario de 60 años.
– Riesgo de intervención militar –
«En el decreto se contemplan un conjunto de funciones, como combatir el narcotráfico, que en otros países se ha probado que cuando las cumplen terminan resultando un boomerang y en lugar de neutralizar el poder del narcotráfico terminan involucrados con ellos», analizó.
«No tengo ninguna duda que ante una situación apremiante con el pueblo ocasionará un desplazamiento de la letra de la norma hacia la acción pública», añadió Pérez.
Daniel Ayala, de la comisión directiva del sindicato de curtidores, dijo a la AFP que «luego de dos años y medio la gente se dio cuenta que gobiernan para los ricos y desplazan a los sectores más desprotegidos, los trabajadores».
«Se le van las cosas de las manos (al gobierno de Macri) y pone a la fuerza militar en la calle para reprimir al pueblo manifestándose», precisó.
La antropóloga social, profesora e investigadora de la Universidad Nacional de Quilmes y CONICET Sabina Frederic, coincidió con Pérez: «En México, Colombia y Brasil se han generado conflictos por abuso de uso de la fuerza contra las poblaciones civiles en las últimas décadas».
«En los paises de la OTAN, las Fuerzas Armadas no intervienen en la seguridad interior, intervienen en caso de amenazas de terrorismo internacional», explicó.
«El riesgo está sujeto a como se define ahora la amenaza. Si el Terrorismo internacional o cualquier fuerza que amenace la independencia política será objeto de intervención militar, del Estado democrático sólo quedaran algunos buenos recuerdos», cerró Frederic.