Miami (AFP) – El gobierno de Estados Unidos está en camino de reunir antes del vencimiento del plazo el jueves a las familias inmigrantes que fueron separadas al cruzar la frontera mexicana, pero cientos de casos no son «elegibles» para la reunificación y numerosos padres podrían haber sido deportados.
Unos 917 casos no son «elegibles» para ser reunidos, o bien no se sabe aún si son «elegibles», indicó un informe judicial del gobierno divulgado el lunes. De ellos, 463 padres podrían estar fuera del país, algunos probablemente deportados sin sus hijos.
El gobierno considera «inelegibles» las reuniones familiares si no han podido confirmarse los vínculos o si los padres tienen antecedentes criminales, padecen una enfermedad contagiosa o no han sido localizados.
El martes, los abogados del gobierno dijeron al juez federal Dana Sabraw que 1.012 padres ya fueron reunidos con sus hijos y que esperan reunir en total a más de 1.600 familias «elegibles» antes del vencimiento del plazo este jueves.
Pero «los otros 917 casos, incluyendo los 463 que pueden no estar en Estados Unidos, no serán reunidos antes del plazo», dijo Adam Isacson, de la ONG Oficina de Washington para Latinoamérica (WOLA), a la AFP. «Le tocará al juez Sabraw decidir si aprueba esto o no».
La política de «cero tolerancia» del presidente Donald Trump provocó la detención masiva de los inmigrantes que entraban al país por la frontera sur, ilegalmente o pidiendo asilo. Esto a su vez causó que miles de niños hayan sido separados de sus padres o tutores, la mayoría entre abril y junio de este año.
Los niños fueron enviados a refugios del Departamento de Salud (HHS) dispersos en todo el país, mientras los adultos iban a centros de detención en ocasiones a miles de kilómetros de distancia de sus hijos.
Esta práctica provocó tal oleada de condenas nacionales e internacionales que Trump se retractó el 20 de junio, cuando ordenó poner fin a la separación familiar.
«Estamos trabajando mano a mano con HHS y ciertamente tenemos la intención de reunir a todas las familias que podamos», dijo el martes la secretaria del Departamento de Seguridad Interior, Kirstjen Nielsen, al canal Fox News.
Pero ubicar a estos padres en México o Centroamérica será un trabajo largo y arduo, advirtió Isacson.
«Hay por delante una tarea monumental. Primero necesitan una lista de los nombres de los padres deportados, que ICE aparentemente no tenía ayer (martes). Luego hay que localizar de alguna manera a personas que fueron desembarcadas en aeropuertos centroamericanos sin expectativas de volverlas a ver», explicó.
– ¿Dónde están los padres? –
El juez Sabraw ordenó al gobierno que entregue, antes del viernes, detalles sobre los 463 padres posiblemente deportados sin sus hijos.
«La falta de transparencia de la administración de Trump se está acercando a un bloqueo», denunció Lee Gelernt, abogado de la mayor organización de derechos humanos del país, ACLU, que entabló la demanda contra el gobierno para exigir la reunificación familiar.
«No olvidemos que la aseveración del gobierno de que cumplirá el plazo de reunificación está basada en el hecho de que está excluyendo a los padres que no puede localizar», dijo en un comunicado.
Hace un mes, el juez Sabraw había emplazado al gobierno a reunir con sus familiares a los niños menores de cinco años antes del 10 de julio; y a los que tienen entre 5 y 17 años antes del 26 de julio.
El primer plazo se cumplió sin que el gobierno pudiera entregar a todos los niños menores de cinco años: 45 de ellos fueron considerados «inelegibles».
Hasta este martes, el Departamento de Salud tenía bajo su custodia, en refugios en todo el país, a 11.500 niños clasificados como «menores sin acompañante» (UAC, en inglés), confirmó un portavoz a AFP.
Esto incluye a los niños y adolescentes que en efecto viajaron sin un adulto a Estados Unidos, pero la cifra también comprende a los niños que cruzaron la frontera con sus familias, fueron separados de ellas y reclasificados como «UAC» al ser enviados a los refugios.
Para el 16 de julio, la oficina de migración ICE tenía bajo custodia a 44.210 inmigrantes adultos en todo el país.