Mientras que las compañías tabacaleras invierten millones de dólares para comercializar sus productos, California no presta mucha atención en la educación de los niños y jóvenes para prevenir la adicción al tabaquismo.
De acuerdo con un informe nacional publicado recientemente por una coalición de entidades de salud pública del país, California ocupó el lugar número 21 en el financiamiento para evitar el tabaquismo entre niños y jóvenes y ayudar a los fumadores a dejar el hábito.
Anualmente el estado invierte 65.5 millones de dólares en estos programas, el equivalente a un 18,8 por ciento de los 347,900 dólares anuales recomendados por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
El informe, “Promesas Rotas a Nuestros Niños”, destaca que las compañías tabacaleras gastan aproximadamente 636.7 millones dólares para promocionar sus productos en California, es decir, las compañías gastan 10 dólares para comercializar sus productos por cada dólar que California invierte en sus campañas educativas contra el tabaquismo.
Además de la poca inversión para la prevención, el informe resalta que en California, el 10,5 por ciento de los estudiantes de secundaria fuman, y 16.800 niños se convierten en fumadores regulares cada año.
Más de 40 mil personas mueren anualmente en California a causa de las enfermedades derivadas del hábito de fumar, que se reflejaen deudas por atención médica de unos 13.3 millones de dólares.
La Legislatura de California consideró recientemente en el establecimiento de un paquete de medidas que incluía proyectos de ley para elevar la edad de la venta de productos de tabaco a 21 años, y la regulación de los cigarrillos electrónicos como productos de tabaco.
La aprobación de ese paquete también habría prohibido que se fumara en las escuelas de California, además de permitir que los gobiernos locales fijaran sus impuestos a los cigarrillos.
«El progreso de California contra el tabaco está en riesgo a menos que el estado aumente significativamente su impuesto sobre el tabaco y restaure el financiamiento de programas eficientes para reducir el consumo de cigarrillo», dijo Matthew L. Myers, presidente de la Campaña Niños Libres de Cigarrilos.
«Las compañías de tabaco son tan implacable como siempre en la comercialización de sus productos letales, por lo que es fundamental que California intensifique sus esfuerzos para proteger a nuestros niños de la adicción al tabaco y ayudar a los fumadores a dejarlo.»
A nivel nacional, Dakota del Norte, ocupó el primer lugar por tercer año consecutivo en este informe, logrando disminuir el hábito de fumar entre los estudiantes de secundaria en casi la mitad entre el 2009 y 2015 (de 22,4 por ciento a 11,7 por ciento).
Aproximadamente 480 mil personas mueren en Estados Unidos anualmente a consecuencia del consumo de cigarrillos, lo que representa un gasto de atención médica de unos 170 millones de dólares.