México (AFP) – El presidente mexicano Enrique Peña Nieto se reunirá con el mandatario estadounidense Donald Trump en la cumbre del G20, informó este jueves la cancillería mexicana.
«Ambos mandatarios revisarán los avances en los diferentes temas de la relación bilateral» en el marco de la reunión del G20 en Hamburgo, Alemania, el 7 y 8 de julio, dijo la cancillería en su cuenta de Twitter. Agregó que más tarde dará detalles de la agenda.
El encuentro ocurrirá luego de que Peña cancelara una visita a Washington el 26 de enero pasado en medio de las tensiones entre ambos países.
La relación entre México y Estados Unidos entró en un punto bajo desde que Trump estaba en campaña, cuando prometió revisar o retirarse del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y la construcción de un muro en los 3.200 kilómetros de frontera entre ambos países pagado por los mexicanos.
Las amenazas de Trump pusieron bajo foco a la economía mexicana, fuertemente dependiente de Estados Unidos, y llevaron al peso mexicano a tocar 22 unidades por dólar en ventanillas bancarias en enero, aunque desde entonces se ha recuperado a los niveles que tenía antes de la elección estadounidense de noviembre de 2016.
Pese a las amenazas, la renegociación del TLCAN se ha demorado más de lo previsto e iniciará en agosto y el polémico muro fronterizo no ha comenzado a construirse.
En agosto de 2016, Trump como candidato realizó una intempestiva visita a México para entrevistarse con Peña Nieto, quien le dio un trato de jefe de Estado, lo que desató duras críticas de distintos sectores sociales y políticos.
Se trató de una visita inédita pues fue la primera vez que un mandatario mexicano se encontraba con un candidato estadounidense.
La tradición entre estos vecinos marcaba un encuentro pero ya con un nuevo ocupante de la Casa Blanca electo.
Los mandatarios mexicanos tenían así la mayor parte de las veces el privilegio de ser los primeros en encontrarse con el nuevo presidente estadounidense.
Pero según analistas, tras la llegada de Trump a la presidencia y sobre todo luego de la cancelación de la visita de Peña Nieto a Washington, las relaciones entre ambos llegaron al punto más bajo desde la guerra de intervención estadounidense de 1848, en la que México perdió casi la mitad de su territorio.